El Consejo de Seguridad de la ONU insta a celebrar unas elecciones "creíbles" en Afganistán

La resolución respaldada por los quince miembros del máximo órgano destaca el "papel crítico" de la misión de la ONU a la hora de asistir en la organización de los comicios programados para el próximo agosto.

El Consejo "subraya la importancia de las próximas elecciones presidenciales y provinciales para el desarrollo democrático de Afganistán e insta a que se garantice la credibilidad y la seguridad de las elecciones".

Al mismo tiempo respalda la labor del jefe de UNAMA, el noruego Kai Eide, al que reconoce la responsabilidad de aumentar la cooperación entre los organismos civiles y la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF).

La resolución también insta a redoblar los esfuerzos para "mejorar el buen Gobierno y el Estado de derecho, y combatir la corrupción al nivel local y nacional, y promover iniciativas de desarrollo".

Por su parte, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, celebró que el Consejo de Seguridad "reafirme el papel central e imparcial en la promoción de la estabilidad y la paz en Afganistán, dijo en una declaración un portavoz de la ONU, Farhan Haq.

También felicita el trabajo de Eide, su enviado especial, que ha "a gestionado la ampliación de lasa responsabilidades de UNAMA" y el hecho de que su labor haya sido reconocida por el Consejo de Seguridad en la resolución.

Eide consideró el pasado 19 de marzo en una intervención ante el Consejo de Seguridad que son creíbles los temores de que las próximas elecciones en Afganistán puedan ser injustas y pidió al Gobierno de Kabul que garantice la transparencia de los comicios.

El diplomático noruego advirtió que unos comicios sin garantías desestabilizarían todavía más un país sumido en un complicado conflicto interno.

Eide señaló que unas elecciones cuestionables fomentarían "en la conciencia de los afganos dudas sobre el valor de la democracia en un momento en que se necesita de más confianza".

El presidente de Afganistán, Hamid Karzai, dio el pasado 7 de marzo marcha atrás en su intención de celebrar los comicios en primavera e invocó el "interés nacional" para aceptar el 20 de agosto, fecha propuesta por la Comisión Electoral, tras la insistencia de EE.UU .y la ONU de que fuesen en verano.