Un juzgado federal de apelaciones ha declarado inconstitucional la prohibición a nivel nacional de los matrimonios homosexuales. Una ley de 1996, que otorga a los estados la potestad de aprobar o no estos matrimonios pero les quita valor a nivel nacional. Se abre así la vía para que el Supremo, la máxima instancia jurídica del país, decida sobre el asunto.