EEUU expresa su "decepción" con la violencia y las restricciones tras las presidenciales en Zambia

El portavoz del Departamento de Estado, John Kirby, ha expresado su "especial preocupación" por la suspensión de las licencias de emisión a la Asociación Independiente de Emisoras, hecho que ha descrito como "enmarcada en la preocupante tendencia de restricciones a los medios".

"Las tradiciones democráticas de Zambia no mejoran con estas restricciones ni ayudan al país a unirse y avanzar", ha apuntado, reclamando a los actores políticos "que busquen la reconciliación".

La Comisión Electoral anunció el 15 de agosto que Lungu se impuso a su principal rival, Hakainde Hichilema, con el 50,35 por ciento de los votos, frente al 47,67 por ciento de este.

Tras el anuncio, el Partido Unido por el Desarrollo Nacional de Hichilema acusó al organismo de haber amañado los resultados para mantener en el poder al actual mandatario.

De hecho, la formación anunció que impugnará la victoria del presidente, dejando en suspenso la investidura de Lungu, ya que, de acuerdo con la legislación zambiana, el mandatario no puede tomar posesión del cargo hasta que se resuelvan los recursos electorales.

Esta parálisis política podría reavivar los disturbios que han precedido a las urnas y que se han repetido esta misma semana en las manifestaciones contra la reelección de Lungu, que han dejado cientos de detenidos.

De confirmarse los resultados oficiales, serían los quintos comicios en los que Hichilema es derrotado. El líder opositor ya se enfrentó a Lungu el año pasado para sustituir en el cargo de forma interina a Michael Sata, que murió en 2014.