España condena el anuncio de nuevos asentamientos israelíes

El Gobierno español ha condenado el anuncio de Israel de que acelerará la construcción de 2.000 viviendas en diversos asentamientos en los territorios ocupados palestinos, incluido Jerusalén Este, y ha advertido de que esta decisión "amenaza la solución de dos Estados" y dificulta los esfuerzos para reanudar las conversaciones de paz.

"El anuncio constituye un motivo de seria preocupación", subraya el Ejecutivo español a través de un comunicado difundido por el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación.

En opinión del departamento que dirige Trinidad Jiménez, la decisión del Gobierno israelí --que reacciona así al reciente reconocimiento de Palestina como Estado miembro de la Unesco-- "amenaza la solución de dos Estados, Israel y Palestina, viviendo en paz y seguridad" y "pone en cuestión los esfuerzos del Cuarteto para la reanudación de las conversaciones de paz".

España considera también "motivo de preocupación" la decisión israelí de suspender la transferencia a la Autoridad Nacional Palestina de la recaudación de aranceles devengados por productos importados en los territorios palestinos, también en represalia por el ingreso de Palestina como miembro de pleno derecho en la Unesco.

El Gobierno español, por tanto, "apela a las autoridades israelíes a que reconsideren ambas decisiones", concluye la nota, que no hace mención alguna a la decisión de EEUU de congelar sus aportaciones a la Unesco en represalia también por la admisión de Palestina.

Tampoco la Alta Representante de Política Exterior de la UE, Catherine Ashton, ha incluido ninguna referencia a EEUU en su comunicado de condena de los asentamientos difundido hoy, si bien con anterioridad uno de sus portavoces había urgido a "todas las partes" a "mantener el apoyo a la misión de la Unesco" y a "pararse a reflexionar antes de actuar de forma precipitada".

También Francia, a través de un portavoz, ha urgido este miércoles a "todos los Estados miembros concernidos a no suspender sus aportes presupuestarios" a la Unesco.