HRW responsabiliza a los prorrusos de los ataques que dejaron más de 40 civiles muertos en el este de Ucrania
EUROPA PRESS
03/02/201511:25 h.Human Rights Watch (HRW) ha señalado a las fuerzas separatistas prorrusas como responsables de los dos últimos ataques con misiles que causaron la muerte de más de 40 civiles, incluidos dos niños, y dejaron unos 100 heridos en el este de Ucrania.
Basándose en las conclusiones de una investigación que ha realizado su personal desplegado sobre el terreno en Ucrania, la ONG ha asegurado que tiene indicios que demuestran que tanto las fuerzas gubernamentales ucranianas como los prorrusos ponen en peligro a la población civil al usar armas explosivas que afectan a áreas muy amplias para acabar con objetivos estratégicos del bando rival.
Según ha concretado HRW, los combates se producen en zonas densamente pobladas, incluso cerca de edificios escolares, lo que viola el Derecho Internacional en cuestiones humanitarias.
"Dos de los ataques más sangrientos en los combates recientes y con víctimas civiles se debieron al uso ilegal de misiles por los rebeldes apoyados por Rusia", ha asegurado Ole Solvang, investigador principal de Emergencias de Human Rights Watch. "Todas las partes deben rechazar el uso de estas armas en zonas pobladas", ha pedido.
INTENSIFICACIÓN DE LOS COMBATES
Tras un periodo de relativa calma, desde el pasado 10 de enero los combates en el este de Ucrania se han intensificado y extendido mientras ambos bandos luchan por conseguir el control del aeropuerto de Donetsk, un incremento de la violencia que se ha traducido en un aumento significativo de las víctimas, ha asegurado HRW.
Según los datos que ha facilitado a la ONG un trabajador sanitario, al menos 341 personas, entre ellas 71 mujeres y 6 niños, murieron en la región de Donetsk solo durante el mes de enero. La investigación de HRW mantiene que la mayor parte de ellos son civiles.
En este contexto, HRW ha denunciado que muchas de las muertes responden a reiteradas violaciones de las leyes de la guerra, en particular, el uso ilegal de misiles en zonas pobladas. De hecho, el 24 de enero, los misiles "probablemente lanzados desde territorio controlado por los rebeldes" provocaron la muerte de 30 civiles y un soldado en Mariupol e hirieron a más de 90 civiles.
No es el único ejemplo que la ONG internacional ha conseguido probar durante su investigación sobre el terreno. Según ha asegurado, otro proyectil impactó en el patio de una escuela. El 13 de enero, otro ataque prorruso acabó con la vida de 12 civiles e hirió a 18 en un puesto de control cerca Volnovaja.
HRW no ha podido atribuir la responsabilidad de un tercer incidente grave el pasado 22 de enero en Donetsk. Murieron 13 civiles, según las autoridades locales.
RESPONSABILIDAD CONJUNTA
Aunque sus últimas investigaciones señalan directamente a los separatistas prorrusos, HRW ha subrayado que "ambas partes deben dejar de usar los misiles y las armas explosivas de amplio alcance en las zonas pobladas". Además, deben empezar a "respetar escrupulosamente sus obligaciones para evitar poner en peligro a la población civil".
En el período de los ataques documentados por el informe de la ONG, las autoridades de Ucrania y otros gobiernos afirmaron que hubo un aumento significativo de las tropas rusas en el este de Ucrania. HRW ha explicado que no puede asegurar que las tropas rusas hayan contribuido en dichos ataques, pero ha pedido a Moscú que permita investigar si las armas, voluntarios o soldados procedentes de Rusia han estado involucrados.