Indígenas de una región amazónica levantada en Perú desbloquean las carreteras
AGENCIA EFE
16/05/200900:00 h.Mientras que en otras regiones amazónicas las medidas de fuerza de los aborígenes continúan, los de ésta región anunciaron que desbloquearán las vías a partir de las 02.00 hora local del sábado (07.00 GMT), luego de que numerosas voces alertaran del peligro de desabastecimiento de alimentos en algunas ciudades de la zona.
Tras once días de bloqueo, la carretera Fernando Belaunde, principal vía entre la región de San Martín y la costa peruana, presentaba una fila de vehículos de diez kilómetros, muchos de los cuales eran transportistas de alimentos y otros productos.
El presidente del consejo de ministros, Yehude Simon, calificó el anuncio como una "buena noticia que demuestra que con el diálogo se pueden solucionar los problemas", en referencia a la llamada a la insurgencia realizada hoy por la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep).
"Los nativos de San Martín han decidido dar un paso atrás (...), han decidido dejar la carretera y volver todo a la normalidad", señaló Simon a la agencia estatal Andina.
El jefe del Gabinete del país andino agregó que en la región amazónica de Ucayali las carreteras también se encontraban despejadas, tal y como confirmaron a Efe fuentes policiales, aunque reconoció que las protestas de los indios continúan en la región de Amazonas.
A pesar de los avances, Simon recordó que los indígenas mantienen su reclamo contra un grupo de decretos legislativos que consideran dañinas para sus intereses, y aseguró que espera retomar el diálogo con los dirigentes de los disconformes en las próximas horas.
En la mañana de hoy, el presidente de Aidesep dio por roto el diálogo con el Gobierno de Alan García y llamó abiertamente a la insurgencia, lo que implicaba "desobedecer al presidente" y hacer obligatorias las leyes ancestrales en los territorios amazónicos.
Sin embargo, este llamado fue criticado tanto por el Gobierno como por otras asociaciones de nativos, como la Conferencia de Nacionalidades Amazónicas de Perú (Conap), que consideró que la medida no representaba el espíritu de los pueblos nativos y abogó por el diálogo.
Aidesep y otras organizaciones han protagonizado en las últimas semanas diversas acciones de bloqueo de carreteras, ríos y hasta de aeropuertos provinciales, así como las operaciones de petroleras y gasísticas, que han requerido la intervención de la policía o de la Marina de Guerra.
El Gobierno se niega a dar a los indígenas poder de decisión en la concesión de licencias para explorar y explotar petróleo y gas, con el argumento de que el subsuelo es propiedad del Estado y de todos los peruanos, y no sólo de las comunidades que allí viven.
Desde el pasado 9 de mayo, rige el estado de emergencia en varias localidades amazónicas de cuatro departamentos del este del país, una medida que los indígenas piden que se levante.