Sorpresa y cierto temor son las primeras impresiones que estos folletos del Ejército británico han causado en una comunidad de vecinos que vive junto al Parque Olímpico. Apenas quedan unos meses para que arranquen los Juegos de Londres y las medidas de seguridad son ya una prioridad. Desde el Ministerio de Defensa no quiere dejar ningún cabo suelto.