Merkel descarta dar lecciones sobre empleo a Macron y espera desarrollar iniciativas nuevas con él

"Estoy muy segura de que habrá muchos puntos en común", ha declarado Merkel en la antesala de la reunión en la sede de la Cancillería. "Haremos todo lo posible para desarrollar iniciativas nuevas con Macron", ha asegurado.

Merkel ha sostenido que espera al líder centrista "abierta y con plena simpatía" y se negó a dar lecciones a Francia para generar empleo. "Soy la última en decir lo que debe hacer Francia (...) No quiero parecer una sabelotodo", ha afirmado.

No es la primera vez que Macron acude a la Cancillería --ya lo hizo como candidato-- pero ahora podrá hablar con Merkel en calidad de mandatario.

El encuentro está precedido por una gran expectación, dado que servirá para que los líderes de los dos países con mayor peso en el viejo continente bosquejen las líneas maestras para el futuro de la Unión Europea (UE).

Macron acude a la capital alemana con el propósito de "refundar y relanzar" Europa en un momento en el que el eje París-Berlín presenta un notable desequilibrio de fuerzas, con una Francia más debilitada.

El político francés quiere profundizar en una mayor integración en la eurozona. Su programa contempla la creación a medio plazo en la unión monetaria de un presupuesto propio para inversiones y un ministro de Finanzas, propuestas que no son nuevas pero que no se han llegado a implementar.

A*su entender, este presupuesto comunitario debería utilizarse tanto para financiar nuevas inversiones como para hacer frente a nuevas posibles crisis de los Estados miembros. Asimismo, aboga por impulsar con el resto de socios europeos un sistema de defensa en el bloque.

Macron considera además que Francia debe cumplir con sus obligaciones europeas, sobre todo en lo que se refiere a la reducción de su déficit público, para poder volver a ser tomada en serio por sus socios de la UE.

Sobre los eurobonos, instrumentos que mutualizarían la deuda de la zona euro mediante la emisión de bonos conjuntos, Macron no se ha pronunciado en campaña, como recordó su asesora en política europea Sylvie Goulard.

Desde Berlín, sin embargo, se ven con cierto escepticismo las propuestas de Macron de profundizar la unión de la eurozona, especialmente la que aboga por crear el puesto de ministro de Finanzas en la Unión Europea, que conllevaría una cesión de soberanía.

A la espera de que los planes para la UE de París y Berlín se concreten, desde Bruselas insisten en que Francia debe cumplir con sus promesas de reformas y reducir su elevado endeudamiento.

Además, se da por supuesto que en la Unión Europea no se tomarán decisiones de calado antes del 24 de septiembre, momento en que Alemania celebra elecciones generales en las que Merkel opta a un cuarto mandato. Hasta entonces, se entiende que la dirigente evitará dar pasos hacia una mayor integración que puedan irritar al electorado.

En este sentido, en una encuesta divulgada recientemente por el semanario 'Focus', un 71 por ciento de los consultados por el instituto Emnid se mostraron contrarios a la emisión de eurobonos, mientras que un 49 por ciento se manifestó reacio a tener un titular de Finanzas conjunto.