Mueren tres soldados de la OTAN en ataques insurgentes en el sureste afgano

En varios comunicados, la ISAF explicó que dos de las víctimas mortales se registraron en el conflictivo sur afgano, una de ellas en un ataque de los integristas ocurrido hoy y la otra, ayer, por el estallido de un artefacto explosivo improvisado (IED, siglas en inglés).

El tercer soldado en cuestión perdió la vida hoy en el este del país también por la explosión de una bomba caminera o IED.

El organismo militar no precisó la localización exacta de los sucesos ni la nacionalidad de los fallecidos, una prerrogativa que corresponde a cada país.

El año 2010 está siendo el más sanguinario para las tropas internacionales desplegadas en Afganistán desde la caída del régimen talibán, en 2001, y la invasión estadounidense del país.

Según datos del portal independiente icasualties.org, que no incluye las bajas de hoy, en lo que va de año han muerto 671 soldados de la fuerza internacional, con lo que son ya unos 2.240 los militares fallecidos desde la llegada de las tropas extranjeras.

Las minas o las bombas camineras de fabricación casera son uno de los métodos favoritos de los insurgentes talibanes para hostigar a las tropas internacionales desplegadas en Afganistán, aunque suelen causar bajas también entre la población civil.