Mueren 15 supuestos insurgentes en un bombardeo de la OTAN en el sur afgano

La Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) de la OTAN aseguró que un grupo de soldados afganos y de la coalición liderada por EEUU se vio sorprendido ayer por insurgentes durante una patrulla en Uruzgán.

Los soldados recibieron fuego de armas cortas y de una ametralladora pesada antiaérea, según la ISAF, tras lo cual solicitaron apoyo aéreo.

Un primer ataque acabó con la vida de tres insurgentes, el segundo destruyó la ametralladora y el último mató a otros once supuestos talibanes.

La información inicial de la que dispone la ISAF "indica que no hubo víctimas civiles" durante los bombardeos.

Los ataques aéreos de la OTAN son criticados por el Gobierno del presidente Hamid Karzai cuando dejan víctimas civiles.

Ayer mismo la ISAF dijo haber concluido la investigación sobre un bombardeo del día 2 de septiembre que, según Karzai, había matado a diez civiles y causado heridas a otros dos, entre ellos un candidato a los comicios parlamentarios del día 18.

La OTAN insistió entonces en que eran insurgentes y ayer, al final de la investigación, dijo no poder descartar "la posibilidad de que hubiera víctimas civiles en el ataque".

Por su parte, un portavoz de la OTAN, Luigi Scollo, dijo que la organización está "segura" de que el ataque alcanzó el vehículo en el que viajaba un líder del Movimiento Islámico de Uzbekistán, que perdió la vida.

"La pregunta es por qué un miembro electoral o candidato estaba viajando con un conocido terrorista", aseveró.