Portugal lanza oficialmente la candidatura de António Guterres para la Secretaría General de la ONU

La oficina del primer ministro, Antonio Luis Santos da Costa, ha anunciado el deseo de Portugal de "contribuir de forma activa al proceso de selección del próximo secretario general presentando un candidato excepcionalmente cualificado", fruto de "un amplio consenso interno".

Da Costa ha destacado que durante su "larga carrera de servicio público", como primer ministro (1995-2002) y ACNUR (2005-2015), Guterres "ha dado pruebas de su compromiso con los ideales humanistas consagrados en los objetivos y principios de la Carta de Naciones Unidas".

El líder portugués ha valorado "la capacidad de liderazgo y gestión al más alto nivel" de Guterres. "Son ampliamente reconocidas sus competencias diplomáticas, esenciales para generar consensos al servicio de un multilateralismo efectivo", ha añadido.

Además, ha esgrimido que Guterres "es un profundo conocedor del sistema de Naciones Unidas y posee una vasta experiencia internacional". Por ejemplo, ha mencionado que durante su época de ACNUR "lidió con uno de los más exigentes desafíos para la comunidad internacional", en alusión a la crisis de refugiados por la guerra siria.

"Por todas estas razones, la candidatura de Guterres es para el Gobierno portugués un imperativo en un momento en el que, más que nunca, es urgente movilizar al mundo en pro de la paz y la seguridad, de los Derechos Humanos y del desarrollo sostenible", ha esgrimido.

LA SUCESIÓN DE BAN

A pesar de su marcado perfil internacionalista, la candidatura de Guterres tiene escasas posibilidades de éxito porque se espera que el próximo titular de la Secretaría General de Naciones Unidas sea una mujer del este de Europa.

El mandato de Ban Ki Moon, que ha ejercido la representación de la ONU desde 2007, expirará a final de 2016, de modo que las intensas negociaciones que preceden a estos procesos de selección obligan a abrir ya la carrera sucesoria.

El proceso comenzó oficialmente el pasado 15 de diciembre, cuando los presidentes del Consejo de Seguridad y la Asamblea General, la estadounidense Samantha Power y el danés Mogens Lykketof, respectivamente enviaron una carta a los 193 miembros para que propusieran candidatos.

Los aspirantes deben tener "probado liderazgo, capacidad de dirección, extensa experiencia en las relaciones internacionales y fuertes habilidades diplomáticas, comunicativas y políglotas", especificaron Power y Lykketoft.

También subrayaron la importancia de mantener "la diversidad regional en la selección de los anteriores secretarios generales", en alusión a la norma no escrita sobre la rotación por regiones, que esta vez favorecería al este de Europa.

"Convencidos de la necesidad de garantizar las mismas oportunidades a los hombres y a las mujeres para acceder a las posiciones de toma de decisiones, animamos a los estados miembros a considerar la candidatura de mujeres, así como la de hombres", añadieron.