Sargsyan, elegido primer ministro mientras la oposición pone en marcha su "revolución de terciopelo"

El expresidente armenio Serzh Sargsyan ha sido elegido primer ministro este martes en la Asamblea Nacional, con el voto a favor de 77 parlamentarios y el rechazo de otros 17, según ha informado la agencia de noticias local Arka.

Sargsyan, que hace una semana presentó su dimisión como presidente del país, ha sido el único candidato para el puesto de jefe de Gobierno, a propuesta de la formación gubernamental, Partido Republicano de Armenia y de la Federación Revolucionaria de Armenia/Dashnaktsutiun.

Su designación como candidato a jefe del Gobierno, el puesto político con más competencias ejecutivas en virtud de la Constitución aprobada en 2015, ha provocado manifestaciones durante los últimos cinco días, encabezadas por el líder opositor, Nikol Pashinyan, quien este martes ha anunciado el inicio de una "revolución de terciopelo" pacífica contra el nombramiento del exmandatario.

En su discurso en el Parlamento, Sargsyan ha dicho que está preparado para dar los pasos necesarios para que el país crezca y para que los ciudadanos tengan mejores condiciones de vida. Tras expresar su agradecimiento a sus compañeros de partido, el exmandatario ha agradecido al grupo opositor Yelq por su papel para afianzar un sistema parlamentario activo.

Sargsyan ha dicho que confía en poder formar gobierno y presentar las líneas generales de su programa muy pronto. Además, ha señalado que tras la formación del ejecutivo el país pueda completar la transición a un sistema parlamentario "con decencia".

El nombramiento de Sargsyan llega en medio de masivas protestas lideradas por la oposición para intentar impedir que fuera designado como jefe de Gobierno. Sargsyan fue primer ministro de 2007 a 2008, cuando se convirtió en presidente del país, cargo en el que ha continuado hasta que presentó su renuncia hace una semana para proponerse como primer ministro, tras la reforma constitucional que convierte a este en el cargo político con más poder de decisión.

Horas antes de la aprobación parlamentaria del nombramiento de Sargsyan, el líder del grupo parlamentario opositor armenio Yelk, Nikol Pashinyan, ha anunciado el inicio de una "revolución pacífica" contra el nombramiento del expresidente.

"Declaro oficialmente que ha surgido una situación revolucionaria en Armenia. Hoy anuncio el inicio de una revolución de terciopelo pacífica", ha afirmado Pashinyan, en un discurso en Ereván, la capital del país, ante sus seguidores.

Las manifestaciones en la capital armenia han continuado este martes, por quinto día consecutivo, provocando el cierre del centro de la ciudad. La jornada del lunes se saldó con 46 personas heridas, incluidos seis policías, en los enfrentamientos entre manifestantes y agentes.

Pashinyan ha dicho que en muchas ciudades del país, incluidas Gimuri y Vanadzor, la segunda y la tercera mayores ciudades del país, y en Ijevan se están llevando a cabo manifestaciones masivas, con la participación de estudiantes universitarios.

El líder opositor ha hecho hincapié en que es necesario continuar con la campaña contra el Gobierno sin emplear la fuerza contra los cuerpos de seguridad pero paralizando el trabajo de todas las estructuras estatales en todo el país.

"Ahora marcharemos hacia los edificios del Gobierno para bloquear su actividad y celebraremos sentadas dentro o fuera de los edificios", ha afirmado.

Tras su discurso, el líder opositor armenio y sus seguidores han bloqueado las entradas de las sedes de la Fiscalía General y de varios departamentos gubernamentales.

Pashinyan y sus seguidores se han dirigido desde la plaza de Francia, en el centro de Ereván, hasta la sede de la Fiscalía General y han decidido hacer una sentada para impedir que los funcionarios sigan trabajando. Pashinyan ha sugerido que varios voluntarios bloquearan las puertas del edificio y ha pedido a sus seguidores que no recurran a la fuerza y sigan protestando de forma pacífica.

El resto de manifestantes han seguido con la marcha de protesta y se han trasladado a un complejo que alberga la sede de los Ministerios de Asuntos Exteriores, Educación y Ciencia, Cultura, Diáspora y Transporte, Comunicación y Tecnología de la Información. El líder opositor ha pedido a sus seguidores que no permitan que nadie salga ni entre de esos departamentos.