Un atentado suicida ha vuelto a sacudir Turquía. Al menos 50 personas han muerto y un centenar han resultado heridas en mitad de una boda entre dos militantes de un partido prokurdo en el sur del país, en la ciudad de Gaziantep. El presidente Erdogan apunta al Daesh como responsable del ataque y asegura que el suicida era un niño de 12 a 14 años.