La UE amenaza con sanciones a los responsables de la violencia en Burundi

"La Unión Europea está decidida a adoptar, llegado el caso, medidas restrictivas contra aquellos cuyas acciones habrían llevado a actos de violencia y represión, graves ciolaciones de los Derechos Humanos y/o pusieran trabas a la búsqueda de una solución política", dice el texto de conclusiones adoptado este lunes por los ministros de Exteriores de la UE reunidos en Luxemburgo.

Para ello, los jefes de las diplomacias europeas han encargado a la Alta Representante de Política Exterior de la UE, Federica Mogherini, que "inicie los trabajos de preparación" para tales medidas restrictivas. Es un encargo "a título preventivo", advierten los ministros, que no dan un plazo para tomar su decisión.

Los Veintiocho muestran así su "profunda preocupación" por la situación de violencia, protestas y persecución que se vive en Burundi, desde que el pasado mes de abril el presidente del país, Pierre Nkurunziza, anunciara su intención de presentarse a un tercer mandato, pese a que la Constitución limita a dos los mandatos posibles.

También recalcan que "sólo con el diálogo y el consenso", sobre la base del respeto a la Constitución", permitirá llegar a una solución política duradera que asegure "la seguridad y la democracia" en el país. "El impasse político y el deterioro de la situación económica y de seguridad implican consecuencias graves para la población y riesgos para toda la región", subrayan los ministros.

Por ello, la UE celebra la movilización de los países de la región para ayudar a encontrar una solución, con especial apoyo a las iniciativas de la Unión Africana (UA), de la Comunidad de África del Este (CAE) y de la Organización de Naciones Unidas.

Sobre la celebración de elecciones, la UE llama a respetar las condiciones "indispensables" para unos comicios creíbles, es decir, que se permita un proceso electoral "pacífico, inclusivo y transparente"; al tiempo que se hace eco del juicio de la UA y de la CAE, que consideran que estas condiciones no se dan "ni es probable que se den en los plazos que marca la Constitución" para la celebración de las elecciones.

En este sentido, pide al Gobierno de Burundi que "acepte la realidad" de esta situación y responda con "actos concretos".