La UNESCO dice que el daño sufrido por el patrimonio cultura de Tombuctú "es más alarmante de lo que se pensaba"
EUROPA PRESS
08/06/201307:03 h.La organización ha cifrado en catorce el número de mausoleos destruidos, entre los que se encuentran todos los que están considerados como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Entre los edificios más relevantes destruidos están la mezquita de Djingareyber, una de las tres madrasas de la universidad de Sankore, construida alrededor del año 1327 con tierra y materiales orgánicos tales como fibras, paja y madera.
Asimismo, el emblemático monumento de El Faruk, ubicado a la entrada de Tombuctú, ha sido totalmente destruido.
Por otra parte, la UNESCO ha cifrado en 4.203 los manuscritos del centro de investigación Ahmed Baba que han desaparecido, mientras que otros 300.000 han resultado dañados y necesitan "urgente conservación".
La organización considera que Tombuctú fue la capital intelectual y espiritual del Islam en África, así como el centro desde el que se expandió por el continente durante los siglos XV y XVI.
La UNESCO ha afirmado estar en coordinación con las comunidades locales "para alcanzar la major manera de reconstruir los mausoleos, salvaguardar los manuscritos y dar una nueva vida al patrimonio intangible, así como para convertir esto en un mayor movimiento de cara a la paz y la reconciliación".
CRISIS POLÍTICA
La crisis política en Malí se desató el pasado mes de marzo, cuando un nutrido grupo de militares descontentos por la falta de recursos suministrados por el Gobierno para combatir al Movimiento Nacional de Liberación del Azawad (MNLA) en el norte dio un golpe de Estado.
Aprovechando el caos institucional, los rebeldes tuareg se hicieron con el control de las tres regiones que forman el Azawad --Tombuctú, Kidal y Gao-- y proclamaron unilateralmente su independencia, aunque este movimiento no contó con el reconocimiento de la comunidad internacional.
Sin embargo, los grupos islamistas presentes en el norte de Malí --Al Qaeda del Magreb Islámico (AQMI), el Movimiento de Unidad para la Yihad en África Occidental (MUYAO) y Ansar Dine--, rápidamente expulsaron al MNLA del Azawad, donde, a partir de entonces, impusieron la 'sharia' (ley islámica).
Asimismo, estos grupos destruyeron múltiples mausoleos sufíes al considerarlos heréticos, desatando una oleada de indignación entre la comunidad internacional.
A principios de enero, estos grupos islamistas comenzaron a avanzar hacia la línea de demarcación en la región de Mopti, mientras que varias unidades de los grupos 'yihadistas' presentes en la zona se desplegaron al sur de Tombuctú, ciudad que ya está bajo control del Gobierno central gracias a la operación militar lanzada con el respaldo de París.
La operación francesa comenzó el pasado 11 de enero, cuando Hollande anunció que su Gobierno atendería la petición de ayuda militar formulada por las autoridades malienses, ante la ofensiva lanzada por los islamistas.
LUCHA DEL MNLA
En abril de 2012, el MNLA arrebató todo el norte de Malí, de mayoría tuareg, a las tropas gubernamentales en una rebelión cuyo fin último era la independencia, pero la revuelta fue rápidamente secuestrada por los tres grupos islamistas.
A pesar de la declaración de independencia formulada entonces por el MNLA, ni Malí ni la comunidad internacional reconocieron el paso dado por el grupo tuareg. Los tuareg han protagonizado varios levantamientos para conseguir que se reconozca la autonomía de dicho pueblo o la creación de un país propio en la región.
Entre 1990 y 1996, los tuareg combatieron contra Malí y Níger en una revuelta instigada por una grave hambruna en la región, la dura represión contra los derechos políticos de esta población y la crisis de refugiados derivada de la debilidad política de ambos países durante la década de los ochenta.
Más recientemente, los tuareg volvieron a tomar las armas entre 2007 y 2009 a causa de la lenta e insatisfactoria desmovilización e integración de los rebeldes en la vida civil y las Fuerzas Armadas. En el proceso, varios políticos tuareg fueron destituidos de sus cargos y algunos terminaron en la cárcel.