UNICEF recalca que son necesarias más acciones de cara al regreso de los refugiados rohingya a Birmania

"Cerca del 58 por ciento de los refugiados son niños, muchos de los cuales siguen traumatizados por sus experiencias de violencia", ha dicho el subdirector ejecutivo de UNICEF, Justin Forsyth.

"Es fundamental que sus derechos y necesidades en términos de protección y ayuda estén en el centro de cualquier acuerdo para el retorno de las familias a Birmania. El retorno de los refugiados a Birmania debe ser voluntario, seguro y digno", ha recalcado.

Forsyth ha destacado que "en los últimos días ha habido informaciones sobre incendios y tiroteos en localidades al otro lado de la frontera", afirmando que "hasta que la seguridad y bienestar de todos los niños que vuelvan a Birmania esté garantizada, es prematuro hablar de repatriaciones".

Asimismo, ha subrayado que "las autoridades de Bangladesh merecen un enorme crédito por todo lo que han hecho para ayudar a estas personas desesperadas", explicando que "bajo su liderazgo, las peores consecuencias potenciales de esta calamidad huama han sido evitadas, pese a unas circunstancias increíblemente difíciles".

"Las condiciones en los campamentos son increíblemente duras", ha lamentado, citando "masificación, falta de agua limpia, medidas sanitarias y educación, todo lo cual tiene un riesgo particular en el caso de los niños".

"Cuanto más tiempo estén estos niños sin posibilidades de aprender, mayor es el riesgo de que pierdan la oportunidad de construir un futuro para ellos y sus familias", ha remachado.

Las autoridades de Bangladesh anunciaron el lunes un aplazamiento del inicio de las repatriaciones argumentando que "hay muchas cosas pendientes", en palabras de Abul Kalam, comisario sobre Refugiados y Rehabilitación del país.

"La lista de personas que va a ser enviada de vuelta aún no ha sido preparada, y la verificación y establecimiento de campamentos de tránsito está pendiente", agregó.

EL ACUERDO

El acuerdo entre ambos países fue alcanzado la semana pasada como resultado del encuentro celebrado entre funcionarios birmanos y bangladeshíes, que se han reunido para discutir sobre el proceso de repatriación acordado el pasado 23 de noviembre.

Tras ello, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, recalcó la necesidad de que el regreso de los rohingya en Bangladesh a Birmania sea "voluntario, seguro y digno".

Más de 650.000 rohingyas cruzaron hacia Bangladesh después de la violenta represión con la que respondió el Ejército birmano a una ola de ataques por parte de milicianos rohingyas el pasado 25 de agosto. La ONU ha calificado la represión de limpieza étnica, algo que el Gobierno birmano rechaza.

Las autoridades de Birmania indicaron el 15 de enero que habían iniciado la construcción de un campamento para albergar temporalmente a 30.000 rohingyas que está previsto que sean repatriados desde el vecino Bangladesh.