Tragedia aérea en el aeropuerto Internacional de San Francisco

Un Boeing 777 procedente de Corea del Sur se ha estrellado al aterrizar con 307 personas a bordo. Dos pasajeros han fallecido y diez han sido hospitalizados con diagnóstico grave. La parte trasera de la nave golpeó con la pista en la maniobra de aterrizaje y el piloto perdió el control. El aparato se incendió, provocando una densa columna de humo. A pesar de la gravedad de las imágenes, más de un centenar de pasajeros pudieron abandonar el avión a pie, a través de las rampas hinchables de emergencia. La compañía a la que pertenecía el aparato, Asiana, niega que la tragedia se haya podido deber a problemas técnicos y ha anunciado que se abrirá una investigación para esclarecer los motivos del accidente. Así mismo, el alcalde de San Francisco, Edwin Lee, convocó una rueda de prensa en el aeropuerto para aclarar que el FBI descarta que el siniestro pueda deberse a un ataque terrorista.