Con su hija muerta entre sus brazos, una mujer muestra los efectos más crueles del apagón en Venezuela

Arrojar luz sobre las causas de lo que está ocurriendo en Venezuela supone una guerra de versiones, radicalmente opuesta. Para el régimen, el imperialismo está detrás del colapso del sistema nacional de electricidad. Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, asegura que se ha utilizado la "alta tecnología que solo tiene el gobierno de Estados Unidos. Siempre todo se sabe porque Dios está con nosotros y se va a saber". Sin embargo, la verdad es bien distinta para la oposición y expertos.

Los trabajadores de las termoeléctricas acusan al régimen de despilfarrar recursos con compras innecesarias, de colocar adeptos políticos y de suspender el mantenimiento. El resultado es un país a oscuras, donde no funciona las telecomunicaciones, los transportes quedan interrumpido, se suspenden las clases y el trabajo, la poca comida que hay en la nevera se estropea y lo que es peor, los enfermos se mueren.

Un ejemplo es el de esta venezolana que, con su hija ya muerta en brazos, cuenta lo que ocurrió cuando la llevó agonizando a un hospital. Según una ONG 15 pacientes necesitados de diálisis han perecido desde que el jueves se produjo el gran apagón, uno de los mayores de la historia.

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