Decapitan a una niña de 13 años tras presenciar el asesinato de su abuela

Mariah López, de 13 años, fue engañada por dos hombres que la guiaron hasta un cementerio de Alabama (Estados Unidos), donde la decapitaron tras ser testigo de cómo apuñalaban a su abuela hasta matarla. Los culpables, Yoni Martínez Aguilar e Israel González Palomino, han sido detenidos y se enfrentan a dos cargos por homicidio.

Según informa el medio local AL.com, la abuela estaba relacionada con el cartel de Sinaloa, una organización de tráfico de drogas. Unos días antes de que se cometiera el crimen, la mujer, Oralia Mendoza, acudió junto a otras tres personas a recoger un lote de metanfetaminas en un intercambio que habría resultado fallido, por lo que los acusados querrían tomar represalias, informan las investigaciones.

Tras las confesiones del propio Aguilar, el día en el que ocurrieron los hechos los acusados convencieron a la menor y a su abuela de que les trasladarían a un lugar seguro alejado de las posibles consecuencias que podría atraer el cártel. Con esta excusa, les llevaron en coche hasta el cementerio de Cave Springs Road.

Tras una acalorada discusión, relatan fuentes policiales, ambos acusados decidieron matar a Mendoza y, tras ella, a la pequeña por haber presenciado el asesinato. La mujer murió tras varias puñaladas causadas por un cuchillo y la menor fue decapitada en una zona más aislada del cementerio. Con todo, Aguilar asegura en sus declaraciones ante el juez que fue su compañero quien le obligó a acabar con la vida de ambas.

La policía inició las investigaciones tres días después, cuando un granjero halló uno de los cuerpos, supuestamente el de la niña, y su familia denunciara su desaparición e identificara el cadáver.