La explotación sexual infantil en Uruguay es "común" y "tolerada", según la ONU

"Uruguay es lugar de origen, tránsito y destino de la trata de personas", aseguró Ezeilo en una conferencia de prensa en la que presentó las principales conclusiones a las que llegó tras realizar una visita de cuatro días al país.

Según la experta, que durante su estancia en Uruguay se reunió con varias autoridades nacionales e integrantes de la sociedad civil, la explotación sexual de niños es un fenómeno "muy corriente".

Tras investigar la situación, Ezeilo encontró que España e Italia son los principales destinos de los menores uruguayos, especialmente niñas, víctimas de explotación sexual.

"Esto ocurre particularmente entre los sectores marginados de la población, que acuden a la prostitución infantil como una forma de superar su mala situación económica", apuntó la relatora.

Por otro lado, el tráfico interno de niños en Uruguay está aumentando, sobre todo debido a que existe una "cultura de tolerancia" ante el fenómeno y una serie de "dinámicas" que posibilitan la demanda de este tipo de comercio.

Además de la explotación sexual, la experta se refirió a un "nuevo tipo de explotación" incipiente en el país que consiste en el envió a Europa de niños "cada vez más pequeños" para que jueguen al fútbol.

Ezeilo, abogada de origen nigeriano que asumió sus funciones en la ONU en 2008, encontró además varios casos de explotación laboral de inmigrantes, sobre todo en las industrias pesqueras y en el sector agrícola, donde el fenómeno ha ido en aumento.

Por otro lado, apuntó que las fronteras uruguayas son "especialmente porosas" y hacen que el país sea lugar de tránsito para traficantes que trasladan a sus víctimas de América a Europa.

La experta, que no ofreció ningún dato estadístico para respaldar sus denuncias aunque aseguró haber conocido casos de primera mano, se mostró preocupada porque la trata de personas en Uruguay es un fenómeno incipiente pero se mantiene "invisible" debido al bajo número de casos que son llevados a la justicia.

Por eso, insistió en que el Gobierno uruguayo debe "esforzarse" en sus políticas para luchar contra los fenómenos relacionados con la trata de personas, además de lanzar campañas de sensibilización a la población y mejorar las leyes de protección de las víctimas y los testigos.

Una de las cuestiones más "preocupantes" es la falta de conocimiento por parte de las autoridades, que según Ezeilo, carecen de información sobre la situación.

"Es urgente que el Gobierno lleve a cabo planes de acción para erradicar la prostitución y explotación infantil, y debería considerar el establecimiento de un organismo nacional que combata el tráfico de personas", apostilló la nigeriana.