Golpe de Estado fallido en Turquía

El ruido de los disparos irrumpe en la noche de Ankara y en el cielo se ven varios cazas que realizan vuelos rasantes y al menos un helicóptero de guerra abre fuego contra el Edificio de Estado mayor. Turquía está sufriendo un intento de golpe de Estado. La operación militar se desarrolla en dos ciudades Ankara y Estambul. Tanques y camiones militares se despliegan las calles. Los militares la televisión pública turca. Hacen leer un comunicado al presentador en el que anuncia el toque de queda y nuevo Gobierno en manos de un consejo temporal. A esa hora, los militares toman el aeropuerto de Estambul y rodean edificios claves como el parlamento, donde se atrincheran los diputados. El presidente, que estaba fuera del país, emite a través de la CNN turca un mensaje por teléfono. Llama a los turcos a salir a la calle para abortar el golpe atribuido al opositor en el exilio Fetulá Gulén. Los militares no tarden irrumpir en las oficinas de CNN y tomar el canal, aunque después acaban linchados por los antigolpistas. Pero, para entonces, la batalla se libra en las calles, como en el puente del Bósforo. Entre tiros y explosiones transcurre una noche de absoluto caos que terminaba siete horas después con el regreso aclamado del presidente a un país que despierta con 2.900 militares detenidos y más de 200 muertos.