Impotencia y resignación en California ante un fuego que sigue avanzando empujado por el viento

Los incendios de California se combaten en condiciones extremas capaces de crear fenómenos como auténticos huracanes de fuego; vientos y calor tan peligrosos que convierten todo en una ratonera. Por algunas carreteras por las que trató de huir la gente los coches calcinados, a un lado del camino, dan cuenta de la dantesca imagen dejada por los incendios. En algunas urbanizaciones no queda ni una sola casa. El fuego las ha devorado todas. Un fuego que se mueve tan rápido que sorprende a los conductores en plena autopista. Parados sobre el asfalto había quienes contemplaban desde la impotencia cómo un helicóptero trataba de parar las llamas que avanzaban sin control.

Es lo último de unos incendios que han causado más de 40 muertos mientras se intenta localizar a decenas de desaparecidos. Una situación que llena a los afectados de impotencia, resignados a observar cómo las llamas se comen toda su vida sin poder hacer prácticamente nada.