El niño yemení de ocho años que cuenta cómo la guerra lo dejó ciego

Esta es su historia, la de Waleen y su madre Layla, seudónimos para preservar la intimidad de ellos que lo han perdido todo en la guerra que asola a su país. El pequeño de tan solo ocho años estaba jugando con sus amigos en las calles de Yemen cuando un ataque aéreo lo alcanzó sin protección. El niño cuenta que "se desmayó y fue trasladado en ambulancia al hospital". La metralla de la explosión le afectó gravemente los ojos y lo dejó parcialmente ciego. Una ONG ha ayudado a Waleed, lo operaron para salvarle algo de la vista aunque todavía necesita más intervenciones. Su madre cuenta todo el malestar que sufre "Waleed, con constantes dolores de cabeza debido al aumento de la presión ocular tras la operación". Como él, muchos niños sufren lo peor de la guerra cada día en la ciudad de Yemen. En los últimos meses, 217 menores yemeníes han resultado heridos. Los niños son, sin duda, las víctimas más vulnerables de esta guerra.