Los tres patriarcas anuncian la reapertura del Santo Sepulcro tras la suspensión de dos polémicos planes
EUROPA PRESS
27/02/201821:09 h.El custodio franciscano de Tierra Santa, Francesco Patton, el patriarca armenio, Nourhan Manougian, y el patriarca griego, Teófilo III, han dado la bienvenida al acuerdo alcanzado por el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y el alcalde de Jerusalén, Nir Barkat, para crear una comisión que se encargue de buscar una solución a ambos asuntos.
Han prometido colaborar "con todos aquellos que aman Jerusalén para garantizar que nuestra ciudad santa, donde nuestra presencia cristiana sigue enfrentando desafíos, continúa siendo un lugar donde las tres fes monoteístas --cristianismo, judaísmo e islam-- pueden vivir y prosperar juntas".
Los patriarcas anunciaron el pasado domingo el cierre indefinido de la basílica, donde se encuentran los restos de la crucifixión y del enterramiento de Jesús de Nazaret. La última clausura se produjo hace 20 años también en contra de decisiones políticas israelíes.
Ahora protestaban porque la Comisión de Constitución, Leyes y Justicia del Parlamento israelí va a debatir un proyecto de ley que permitiría al Estado confiscar terrenos que hayan vendido las iglesias a inversores privados desde 2010 pagando una compensación a los nuevos propietarios.
También ha influido la reciente decisión del Ayuntamiento de Jerusalén de embargar las cuentas bancarias de las iglesias hasta que se abonen los millones de shekels (1 shekel es 0,20 euros) en impuestos municipales supuestamente impagados.
El Ayuntamiento ha anunciado este martes que ambos planes, que los religiosos han enmarcado en "una campaña sistemática" contra las iglesias presentes en la ciudad santa, quedan en suspenso hasta que dicha comisión encuentre soluciones.
Por su parte, un portavoz del presidente palestino, Mahmud Abas, ha instado a Israel a cancelar estos planes que, según ha advertido, propiciarían una nueva "escalada de tensión e inestabilidad". Algunos palestinos son cristianos y se concentran en la ciudad cisjordana de Belén.