Cerca de un centenar de trabajadores latinos que construían una sucursal de la empresa de transporte UPS en Indianápolis (Indiana, EE.UU.) abandonaron su lugar de trabajo como protesta después de que un jefe, calificado de racista, despidiera a un grupo de ellos. Antoine Dangerfield, un soldador de la obra, captó el momento en que los empleados detuvieron sus labores en plena jornada laboral y comenzaran a desalojar las instalaciones hasta quedar vacías en su totalidad.