El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió de un ataque inminente a Siria, y la marina estadounidense desde la base de Virginia ha zarpado seis buques de guerra con misiles cargados. Es una respuesta directa del presidente a las amenazas del embajador ruso en el Líbano de derribar cualquier artefacto estadounidense lanzado sobre Siria. Sin embargo, no sería por sorpresa como el de hace un año con el lanzamiento de 59 misiles de crucero contra una base aérea de Homs.