Ares llamará en el Parlamento al máximo consenso para crear un centro memorial

El consejero de Interior, Rodolfo Ares, pretende comparecer el próximo mes de febrero en la Ponencia de víctimas del Parlamento vasco para reclamar el máximo consenso en torno a la creación de un centro memorial y un instituto de la Memoria de las víctimas. En el impulso de estos proyectos, Ares buscará "la máxima cooperación" también con el Gobierno central, por lo que será una de las cuestiones que planteará al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, en un encuentro cuya fecha está por concretar.

Además, el pebetero en conmemoración de los 15 policías vascos asesinados por ETA, que se encuentra en la Academia de Arkaute, se apagará el próximo 1 de febrero en el 30 aniversario de la Ertzaintza, que presidirá el lehendakari, Patxi López, y en el que, previsiblemente, estarán presentes todos los que han sido, hasta el momento, consejeros del Interior del Gobierno vasco: Rodolfo Ares, Javier Balza y Juan María Atutxa, entre otros cargos institucionales.

En una entrevista a Europa Press, el titular de Interior ha apuntado que su intención es comparecer en febrero en la Ponencia de victimas de la Cámara autonómica para concretar la constitución de un centro memorial, "que recuerde y rinda homenaje a todas las víctimas contempladas en las Leyes de Víctimas del Terrorismo". En ellas, están integradas víctimas de ETA, del GAL o del Batallón Vasco Español.

Rodolfo Ares ha apuntado que este centro permitirá desarrollar todo tipo de actividades, que no sólo se centrarán en el recuerdo y homenaje a las víctimas, sino que albergará también exposiciones permanentes.

El objetivo es, según ha asegurado, que "nunca se olvide el daño y el sufrimiento que el terrorismo ha causado para que jamás se vuelva a repetir y, especialmente, para contribuir a la educación en valores éticos y democráticos de paz, de libertad y convivencia".

Además, ha señalado que también se creará un Instituto de la Memoria y Convivencia, que será "un organismo público, con una estructura muy pequeña, cuyo objetivo es desarrollar políticas de memoria y convivencia, de forma que integre toda una serie de actividades mucho más amplias". En él se coordinarán y respaldarán "todas las políticas que se consideren adecuadas en lo que se refiere a memoria y convivencia.

En ese sentido, Ares ha precisado que, tal como se contempla en las Leyes de Víctimas, este "gran" centro memorial se desarrollará "buscando el máximo consenso y la máxima cooperación con el Gobierno de España".

"Mi propósito es que sea una de las cuestiones que se aborde con el nuevo ministro, en cuanto sea posible que nos reunamos para ponernos de acuerdo, para que un equipo conjunto que represente a las dos administraciones impulse este proyecto", ha indicado.

El consejero ha dicho que ése será "el momento de definir y concretar edificios, ubicaciones, el proyecto definitivo del memorial, contenido de la exposición permanente, posibles exposiciones itinerantes y acciones a desarrollar".

Ha añadido que también quiere que el Instituto de la Memoria y de la Convivencia "cuente con el máximo consenso político e institucional". Por ello, comparecerá en la Ponencia de víctimas "para dar cuenta de estas dos iniciativas y buscar el máximo consenso".

"Todos deberíamos hacer un esfuerzo para no entrar en debates y en conflictos partidarios, sino todo lo contrario, hacerlo con el máximo rigor y con el máximo consenso", ha aseverado.

"VALORES DE VERDAD"

Rodolfo Ares ha recordado que el lehendakari anunció en el debate de política general que, desde el Ejecutivo vasco, se quería construir "un país sustentado sobre valores de verdad, memoria, dignidad y justicia", en el que se recuerde "permanentemente lo que ha pasado en Euskadi: el daño, el sufrimiento y el dolor que ha traído a la ciudadanía vasca el terrorismo".

Por ello, ha subrayado que el Ejecutivo pretende "asentar la convivencia y construir el futuro, pero sobre una sociedad decente, sustentada en valores éticos y democráticos de tolerancia, de paz, de libertad y de memoria".

"Para ello, es imprescindible que no se permita, como pretenden los radicales abertzales, que se rescriba la historia como si aquí hubiera habido dos bandos enfrentados o no hubiera habido gente que asesinaba y gente que fue asesinada, o no hubiera habido gente que daba cobertura y apoyo a la banda terrorista ETA, a la violencia", ha añadido.

El titular de Interior ha instado a no olvidar que, "todavía no hace mucho, en las filas de los radicales abertzales se gritaba: 'ETA mátalos' o 'Gora ETA'". "Pueden cambiar, creemos que han cambiado, pero no vamos a permitir que rescriban la historia y menos que no asuman la responsabilidad de su pasado. Tenemos que construir el futuro juntos, pero desde la asunción de la responsabilidad de cada uno de nosotros de nuestro pasado", ha añadido.

En este sentido, ha rechazado que se puedan hacer "equiparaciones absolutamente inaceptables, como pretenden los radicales abertzales". "Con el objetivo de construir la convivencia y el futuro entre todos, cada uno asumiendo sus responsabilidades, estamos impulsando una política de memoria que tenga como eje fundamental dos instrumentos que el Gobierno vasco quiere impulsar con el máximo consenso político e institucional, tanto en Euskadi como con el Gobierno Mariano Rajoy", ha dicho.

PEBETERO

Además, Ares ha revelado que ha invitado a los extitulares de Interior, Javier Balza y Juan María Atutxa, al acto del 1 de febrero que procederá a apagar la llama del pebetero colocado en la Academia de la Ertzaintza de Arkaute en recuerdo a los 15 ertzainas asesinados por ETA.

Este pebetero fue encendido el 23 de diciembre de 1993 por Atutxa, tras el asesinato del sargento mayor de la Policía vasca, Joseba Goikoetxea. En él consta una placa con los nombres de todos los agentes muertos y la frase: "Permanecerá encendido mientras exista violencia organizada en nuestro pueblo".

En su día, el propio Juan María Atutxa anunció que la llama se apagaría cuando finalizara la actividad armada de ETA, y ahora el Gobierno vasco, tras el anuncio del cese de la violencia por la banda, pretende que esto se materialice durante el 30 aniversario de la Ertzaintza, que estará presidido por Patxi López.

Paralelamente, se inaugurará, en un acto "sencillo y solemne", un monolito de recuerdo a las 15 ertzainas y los 22 policías locales asesinados por ETA, que recoge el nombre de todos los agentes. "Queremos que sea un día para celebrar que ETA ha abandonado todas las actividades terroristas, y a la vez, reafirmar nuestro compromiso de recuerdo y homenaje permanente a quienes fueron asesinados por defender las libertades de la ciudadanía vasca, nuestros derechos, instituciones y gobierno", ha afirmado Rodolfo Ares.

Los agentes de la Policía autonómica muertos a manos de la banda armada son: el teniente coronel, Carlos Díaz Arcocha; el delegado general para Asuntos de la Ertzaintza, Genaro García de Andoain; el sargento, Joseba Goikoetxea; el subcomisario, Mikel Uribe, así como Juán José Pacheco, Luis Hortelano, Alfonso Mentxaka, José Luis González Villanueva, Iñaki Mendiluce, Ramón Doral, José María Aguirre, Jorge Díez Elorza, Iñaki Totorika, Mikel Uribe, Javier Mijangos y Ana Isabel Arostegi.

En cuanto a los policías locales asesinados por ETA son: Eloy García, José María Díaz, Manuel Lemus, Antonio García Caballero, Ángel Cruz, Juan Jiménez, César Pinilla, Miguel Chavarri, Pedro Ruiz,

Manuel Ferreira, Alfonso Manuel Vilariño, Ángel Astuy Rodríguez, Miguel García, Benigno García, José Aybar, Manuel Peronie, José Naranjo, Juan Rodríguez, Vicente Garjate, Alfonso Morcillo, Joseba Pagazaurtundua y Jesús Lolo Jato.