Arrestan en México a 92 policías municipales por nexos con el narcotráfico

El grupo de "Los Zetas" tenía una base de operación en el estado de Hidalgo, donde sus actividades de secuestro y extorsión eran protegidas presuntamente por los policías detenidos, agregó el ministerio en un comunicado.

Explicó que la investigación comenzó en octubre de 2008, cuando fueron detenidos siete contadores que presuntamente llevaban la contabilidad de "Los Zetas" y a quienes se les decomisó información de movimientos financieros en diferentes estados, incluyendo Hidalgo.

Entre los documentos hallados está información "sobre el pago quincenal a su personal, deudas de droga, dinero en su caja chica y la cantidad mensual que pagaban a autoridades policíacas con el fin de que estas les brindaran apoyo y protección", dijo la SSP.

Añadió que del pasado 4 de febrero a la fecha la SSP ha realizado seis operativos en Hidalgo, que han derivado en la detención de 124 personas relacionadas con cinco estructuras de "Los Zetas", 92 de ellos policías.

Entre los detenidos desde febrero, dijo el ministerio, hay presuntos secuestradores y sicarios, y varios de ellos revelaron que diferentes corporaciones policiales "les brindaban apoyo y protección".

Además, en una casa que utilizaban los secuestradores para mantener a sus víctimas fue encontrada "una nómina con nombres, claves y cantidades de dinero que era pagada a elementos de la policía municipal y ministerial" de Hidalgo.

En otro de los operativos, este realizado el pasado 26 de marzo, los agentes encontraron en una casa "restos humanos de 14 personas, incluyendo los de un menor".

En la detención de los 92 policías participaron 600 agentes federales de las áreas de inteligencia, investigación y operaciones especiales, apoyados con 40 patrullas y 4 camiones.

Los policías fueron puestos a disposición del agente del Ministerio Público de la Federación.

Las autoridades federales llevan a cabo desde hace un año una operación limpieza en todas las policías municipales, estatales, incluso federales, con un saldo de decenas de detenidos en varios estados, como el norteño Nuevo León y el occidental de Michoacán.