Brieva, el pueblo que vivía tranquilo hasta que Urdangarin ingresó en su cárcel

Esta es la crónica de un pueblo que ha visto sobresaltada su descansada vida lejos del mundanal ruido. Brieva vive adosada a la prisión que da nombre, pero ajena a los vaivenes de este penal para mujeres. Hasta que de tarde en tarde llega un recluso famoso. Detrás de Iñaki Urdangarin han hecho acto de presencia los primeros curiosos. El único bar hace todo de todo en uno. Y en estos días, turismo carcelario que irá a más si aparece la Infanta Cristina.

De momento, los pocos vecinos que residen todo el año en esta pedanía de Ávila miman su imagen hasta el último detalle. No hay tiendas, ni farmacias. Aquí pasa consulta el médico. El único bar hace todo de todo en uno. Y en estos día, es primera línea del alboroto mediático que les ha venido encima.