El CGPJ afirma que la reforma de Gallardón tiene vocación de futuro "con independencia de que haya cuestiones polémicas"

El vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y miembro de la Comisión Permanente, Juan Manuel Fernández, ha afirmado que el anteproyecto de reforma de Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) tiene vocación de futuro, "con independencia de que haya cuestiones más o menos polémicas", tales como la instrucción de causas con tres jueces o el tema del aforamiento.

Fernández se ha pronunciado en estos términos en declaraciones a los medios de comunicación momentos antes de asistir al curso 'Presente y futuro de la discapacidad' que se celebra en Valencia, al ser preguntado por su opinión sobre la reforma de ley impulsada por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón.

Al respecto, Fernández ha subrayado que la "necesidad" de un nuevo modelo de organización judicial "parece inobjetable", puesto que la justicia "tiene problemas en la organización que acaban afectando a su eficiencia". "Cuando esto ocurre -ha agregado- se produce incluso un descrédito ante la sociedad, una cierta deslegitimación democrática de la justicia que no puede suceder".

La justicia --opina-- "necesita ser eficaz, eficiente, y para ello es preciso reflexionar sobre el modelo de organización judicial". "Tenemos que ver cuál es la forma de conseguir una instrucción más ágil, más rápida, sin perder obviamente de vista un principio fundamental como es el derecho a la presunción de inocencia, y conseguir una efectividad lógica de que las instrucciones sean eficaces", ha agregado.

Una de las vías que se ha planteado para afrontar este aspecto es la instrucción colegiada, "que habrá que analizar porque plantea algunos problemas orgánicos que están en el mente de todos". Al respecto, ha indicado que se ha planteado también la posibilidad de trasladar la instrucción al ministerio fiscal, "un debate que se produce en España en las últimas décadas".

Preguntado entonces por si considera que el anteproyecto de ley aprobado es bueno, ha insistido: "es una reforma absolutamente necesaria, y ahora estamos en el principio de ese proceso. El CGPJ deberá de analizar cuál es el texto que nos ha remitido el Gobierno y con el resto de jueces, asociaciones judiciales y operadores jurídicos determinar qué cosas están bien, menos bien y aportar nuestras propias reflexiones", ha aseverado.

A su entender, es una ley "medular" para el poder judicial, es una normativa que "debe tener una vocación de futuro, un futuro largo". Interpelado por si considera que esta normativa tiene esa vocación, ha contestado: "yo creo que sí, ha nacido con eso y nosotros lo percibimos, con independencia de que haya cuestiones más o menos polémicas como la que se ha planteado, o siendo conscientes de los problemas que plantean los tribunales de instancia y su relación con los partidos judiciales y los problemas de todo tipo, también políticos, que suscita este nuevo modelo del poder judicial".

A su juicio, la reforma es "absolutamente necesaria" y que haya cuestiones "controvertidas" forma parte de la propia "importancia" de la ley: "para nosotros --la normativa-- es de la máxima importancia y sería imposible que no tuviera estos aspectos controvertidos", ha repetido.

INSTRUCCIÓN CON TRES JUECES

En esta línea, preguntado por si cree que la instrucción con tres jueces puede agilizar o entorpecer el funcionamiento de la justicia, ha señalado: "la cuestión que vemos es que un solo juez, a veces, en casos que están en mente de todos, tiene que afrontar causas de una complejidad extraordinaria, lo cual a pesar del enorme esfuerzo con que se llevan a cabo y de su independencia, a nadie se le oculta que causas de este volumen y complejidad es difícil tramitarlas más rápido".

A ello se une los "problemas" que se pueden suscitar "cuando se producen situaciones que afectan al juez que lleva la instrucción, desde que inciden en su ámbito personal o en el status orgánico, lo que plantea problemas", ha dicho.

Por otro lado, preguntado por el tema del aforamiento, que también se incluye en el anteproyecto de la ley, Fernández ha comentado que el aforamiento "está planteando problemas" y "sin duda será uno de los aspectos fundamentales a estudiar y analizar".

A su juicio "parece claro que hay un número excesivo de aforados, al tiempo que hay ausencias significativas, de forma que es uno de los primeros aspectos que habrá que tratar, siendo conscientes que existe un estado de opinión general que cuestiona la figura", ha puntualizado.

Desde estos parámetros, ha afirmado, "habrá que precisar quiénes deben ser aforados respecto de aquellos que la institución sigue conservando su naturaleza esencial, y aquellos otros supuestos que puedan ser enjuiciados conforme a los cánones ordinarios". "Será uno de los aspectos centrales a estudiar, porque la opinión pública tiene preocupación sobre este particular", ha insistido.