Carmona condiciona el apoyo del PSOE en la investidura a un plan de choque para la limpieza de Madrid

"Los socialistas madrileños exigimos para el pleno de investidura el compromiso de los partidos políticos de la presentación de un plan de choque para mantener Madrid limpio durante los seis primeros meses de mandato, auditar las empresas integrales de limpieza, el control ciudadano de la limpieza, una nueva ordenanza de limpieza... En definitiva, transformar Madrid en una ciudad verdaderamente limpia", ha apuntado Carmona.

Según ha informado la formación política en un comunicado, la limpieza de Madrid es el segundo motivo de preocupación de la ciudadanía madrileña, según la Encuesta de calidad de vida y satisfacción con los servicios públicos en la ciudad de Madrid 2014, elaborada por el Ayuntamiento de Madrid.

Desde el PSOE han criticado la "reducción de 1.903 empleados de limpieza viaria y 633 jardineros" y la "no cobertura de las bajas de este personal".

El plan de limpieza propuesto por los socialistas se aplicaría a toda la ciudad y consistiría en el baldeo intensivo de las calles, eliminación de los residuos acumulados y limpieza exhaustiva de aceras, parques y jardines. "Un nivel de limpieza que debe mantenerse en el tiempo, para lo que es preciso negociar con las empresas concesionarias que en un plazo de seis meses la limpieza de Madrid sea óptima, como es su obligación, porque de no ser así se valoraría la rescisión de contrato por incumplimiento", han apuntado en un comunicado.

Asimismo, los socialistas reclaman que se auditen los contratos de limpieza viaria para establecer estrictos controles del servicio y que se incorporen mecanismos de control ciudadano de la calidad de la limpieza viaria: un número elevado y verificado de denuncias de suciedad por parte de los vecinos y vecinas podrá suponer la aplicación de sanciones a las empresas.

Paralelamente y entre otras medidas, el PSOE propone una nueva ordenanza de limpieza que contemple además el refuerzo de la limpieza viaria en situaciones extraordinarias (quieren crear brigadas especiales de recogida de la hoja en otoño); la intensificación de las campañas de desinsectación y desratización (especialmente en zonas inter bloques de toda la capital de las que ahora no se ocupa el Ayuntamiento); o la instalación de 90 urinarios públicos, distribuidos en zonas estratégicas de la ciudad, gratuitos y adaptados para personas con alguna discapacidad.