Clavijo quiere traspasar la gestión social y su ficha financiera del Gobierno regional hacia cabildos y ayuntamientos

En una entrevista concedida a Europa Press, Clavijo ha explicado que una de las primeras medidas que querría tomar si consiguiera aglutinar la confianza de los ciudadanos es la "ley de servicios sociales, para desbloquear la gestión de la PCI (Prestación Canaria de Inserción) y la descentralización de determinados servicios a ayuntamientos y cabildos".

Así, defendió que si llega a ser presidente de Gobierno ya tiene un primer paquete de medidas en mente, dentro del que también está separar la cartera de Economía de la de Hacienda: "la estrategia económica de Canarias, que va a ser fundamental en los próximos 4 años tiene que estar en una única consejería y no poner Hacienda y Economía en una".

Y es que Clavijo considera que "el que recauda y vela por las arcas públicas no puede ser el mismo que tiene que estar planificando y lanzando las estrategias de la economía de Canarias".

Otra medida que ya tiene decidida es la ya anunciada desaparición de la Comisión de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente de Canarias (Cotmac) y que sean los ayuntamientos, con la supervisión de los cabildos, los que aprueben los planes de ordenación. "Tienen que poder pasar cosas en Canarias, que se genere actividad económica", insistió.

RECUPERARÍA EL DIÁLOGO CON EL GOBIERNO CENTRAL

Además, el actual alcalde de La Laguna (Tenerife) se "centraría en recuperar el diálogo con todas las administraciones" pero sobre todo con el Gobierno central.

Y todo esto, se compromete a hacerlo antes de que pasen 6 meses de alcanzar el Ejecutivo. Estas y otras medidas van a estar "orientadas al crecimiento económico", ha destacado, que sería también el eje de los presupuestos de 2016.

Sobre la posibilidad de recuperar una consejería propia para Turismo, considera que es "razonable" pensar en que Canarias tenga un consejero dedicado a un sector clave para su economía, aunque matizó que no es algo que tenga claro todavía. "Si hay que formar un gobierno con pacto hay que analizarlo. Me parece razonable pero no es que tenga la certeza ni lo tenga decidido".

PREFIERE "NO" HABLAR DE PACTOS

Pero al entrar en el terreno de los pactos, Clavijo dijo "no" gustarle "hablar de pactos" a estas alturas. "Tenemos que hacer nuestro esfuerzo para que la gente nos apoye, ganar las elecciones y que seamos la opción que la gente prefiera las próximas elecciones", sostuvo.

"Luego ya veremos todos. Hay que ser pragmático [en caso de que sea necesario un pacto], pero no es cuestión de repartir un gobierno en compartimentos estanco. Hay que compartir un camino, compartir una idea de por dónde tiene que ir Canarias. Ahora no hay predilecciones por uno ni por otro, sino que estamos centrados en ganar las elecciones", aseveró.

Sobre los nombres ya designados (o que suenan) para competir contra él en los comicios, dice que se lleva "bien con todos". "Con todos tengo buena sensación, pero al margen de que no las tuviera, uno tiene que saber lo que representa y que por encima de todo está Canarias. Las simpatías no van a inclinar el pacto sino el compromiso con Canarias", concluyó.

"ES NECESARIO BAJAR LA PRESIÓN FISCAL"

El candidato nacionalista cree "firmemente que es necesario bajar la presión fiscal para poder generar más crecimiento ecónomo", pero "no" quiso "prometer" nada al respecto en cuanto a una bajada específica de los impuestos que dependen de la Administración regional: "No voy a prometer una bajada de impuestos y luego no cumplirla, como otros; lo veremos cuando tengamos los datos exactos", explicó, porque con su formación como economista tiene claro que "se puede recaudar más bajando los impuestos".

En todo caso, gran parte de la presión fiscal que registran los canarios depende directamente del Gobierno central y en ese campo se mostró partidario de presionar para alcanzar una bonificación permanente "del 50 por ciento de las cuotas a la Seguridad Social", así como otra para el IRPF. "Ahora se produjo una reforma y ya los ciudadanos están pagando menos. Se nota en las nóminas y estamos esperanzados en que ello mejore el consumo", deseó.

Y es que, sostuvo, para Canarias este es el "momento para cambiar" el "sistema productivo", no con la mente puesta en los próximos cuatro años, pues será un cambio que se vea en "diez o quince". "Pero las decisiones sí hay que tomarlas en los próximos cuatro años", defendió. "Es complicado y duro pero precisamente de la crisis es de donde tenemos que renacer", remarcó.

Así, y sin abandonar el turismo y la construcción en la medida que sea posible, hay que "empezar a cambiar y externalizar la economía, producir, tecnología, investigación e industria", para no "condenar a nuestra ciudadanía tasas de paro del 20 por ciento" no en las épocas malas, sino en las buenas (actualmente es de un 32%). "Y hacia dónde hay que orientar eso, pues a África, que está a dos horas y media y tiene 1.100 millones de habitantes. Ahí tenemos capacidad de exportar y esos empleos se generarán en Canarias", aseveró.

POBREZA Y ECONOMÍA SUMERGIDA

Clavijo tiene claro que la gestión pública de la redistribución de la riqueza "no se ha hecho bien" porque la crisis ha "agravado notablemente la desigualdad, incluso la de género". Al respecto, considera que "se ha fundido a la clase media, hay unos pocos ricos más ricos que nunca y la clase media se ha reducido a la mitad o menos, mientras que una gran masa de gente está por debajo del umbral de la pobreza". En Canarias, recordó citando datos de Cáritas, el 35 por ciento de la población está por debajo de ese umbral.

"Eso es consecuencia de la crisis. Nosotros no tenemos petróleo, ni diamantes, ni oro, ni minas de nada nacionalizadas. Dependemos de la economía del propio país. Cuando algunos me tachan de derecha porque quiero desatascar la gestión de suelo, les pregunto a todos aquellos que si con solo funcionarios mantenemos este país. Porque el sueldo de ellos depende de que cobremos impuestos y los impuestos vienen de que haya actividad económica. Y sin ello no podemos generar bienestar. Más allá de ser una política de derecha, la de desatascar el suelo es una política social", incidió.

Sobre la economía sumergida en Canarias dijo estar de acuerdo en que aflorarla haría que nos fuera "mejor a todos", pero eso sí, tiene claro que hay que empezar por "los grandes defraudadores" y "no por los más débiles". "Empezemos por los grandes, no por el que está plantando unos saquitos de papas para poder escapar. Sabemos quienes son los grandes defraudadores y ahí poco a poco [ir aflorando]. En vez de controlar tanto la actividad tendríamos que controlar ese otro campo y tener personas orientadas a ello", concluyó.