Concejala socialista ve a Carmena como un "mal menor" y la alcaldesa la llama "miserable"

Este intercambio de calificativos ha sido el punto y final a una comisión de Cultura en la que ha sido notorio el desencuentro entre ambas. Para Espinar, la regidora adolece de "incapacidad, problemas auditivos en frecuencia democrática, carencias gestoras" en el área de Cultura, de la que ahora mismo está al frente.

Mar Espinar se ha mostrado "desilusionada" por las formas usadas en la elaboración de ese Consejo de Cultura, donde dieron al equipo de Gobierno una "partitura" de la que han "borrado su nombre (en referencia al PSOE)".

En este punto, la edil socialista ha criticado que Carmena rechazara reunirse con Jaume Collboni cuando ejercía en Barcelona como responsable del área de Cultura del Consistorio. "¿Cuántas veces le invité a que se pusiera en contacto con Collboni para recabar un modelo exitoso en cultura?", ha preguntado Espinar.

Así, ha remarcado que el PSOE "alfombró el puente" a Carmena "para que pudiera conocer cómo se hacían allí las cosas", pero "jamás fue a unirse allí". "El PSOE ha hecho todo lo posible por ayudarle a realizar políticas culturales acertadas", ha apostillado.

"COMO MAL MENOR, NO COMO BIEN SUPREMO"

A continuación, Mar Espinar ha recomendado a Manuela Carmena que si quiere ser su "jefa" y darle "órdenes", se afilie al PSOE, algo de lo que Espinar estaría "encantada". "Nos han llevado al extremo; Ahora Madrid gobierna porque el PSOE entiende que la etapa del PP no se puede permitir. Está donde está como mal menor, no como bien supremo", ha remarcado.

"Dotemos a esta Casa de una gestión estable que vele por la Cultura", ha propuesto la concejala socialista, quien ha acusado a Ahora Madrid de querer "entregar el poder a sus afines".

En su turno de réplica, Carmena ha apelado a la importancia de la "capacidad de control", y ha pedido acabar con los "enfadillos" de que el protagonismo se lo lleven unas y no otras personas.

Además, la regidora madrileña ha apostado por poner sobre la mesa, al comienzo de la próxima comisión, los documentos e intervenciones de todos los intervinientes y "quitar de ahí los insultos, cuasi insultos y descalificaciones".

Esta propuesta ha sido sugerida por Carmena al observar en la oposición "malos pensamientos", que ha pedido dejar "colgados en la puerta".