El Congreso congela hasta la vuelta del verano la iniciativa para 'blindar' los toros

Esta iniciativa legislativa, que busca 'blindar' la Fiesta para que no pueda ser prohibida como decidió Cataluña, llegó al Congreso el pasado año con más de medio millón de firmas de ciudadanos --entre ellas las de Mariano Rajoy, Esperanza Aguirre, Mario Vargas Llosa y Joaquín Sabina -- y el aval de toreros y empresarios taurinos.

El presidente del Congreso, Jesús Posada, y el de la Comisión de Cultura, Juan Manuel Albendea, recibieron solemnemente a sus promotores organizando un acto público en el Palacio de la Carrera de San Jerónimo.

Meses después, en febrero de este año, el texto fue tomado en consideración por el Pleno del Congreso con el apoyo de PP y UPyD y la abstención del PSOE, pero desde entonces se ha venido ampliando el plazo de presentación de enmiendas semana tras semana sin que todavía haya llegado a arrancar su tramitación pese a su escaso articulado.

ESPERANDO AL MINISTERIO

Las prórrogas, según indicaron a Europa Press fuentes parlamentarias, se deben a que el Ministerio de Educación y Cultura está preparando una redacción más completa de la iniciativa ciudadana. Además, el PP pretendía abrir una ronda de comparecencias de expertos que ofrezcan sus puntos de vista sobre la iniciativa.

A la espera de que esos planes se concreten, la Mesa del Congreso ha acordado parar la tramitación parlamentaria hasta septiembre. A la vuelta del verano será ya el momento de presentar las enmiendas para que sean debatidas en la Comisión de Cultura.

Así las cosas, ya se descarta que la iniciativa pueda aplicarse antes de que acabe la temporada taurina en España, cuya final se sitúa tras la Feria del Pilar de Zaragoza. Menos aún estará disponible en la Mercè (24 de septiembre).

UN NOBEL PIDE PARARLA

Mientras tanto, hace unas semanas llegó a la Comisión de Cultura una carta del escritor surafricano John Maxwell Coetzee, premio Nobel de Literatura en 2003, en la que pide a los diputados que frenen la iniciativa.

En su carta, el escritor afincado en Australia afirma que el toreo es "una afición arcaica" y un "espectáculo violento y sangriento": "Torturar y asesinar toros por mero espectáculo pertenece a la Edad Oscura y no a la España del siglo XXI", señala, pidiendo a los diputados que se opongan a esa petición ciudadana.