Los detenidos en Cornellá mantenían contacto con otro yihadista que se fue de España a Siria

Los dos detenidos este miércoles por los Servicios de Información de la Guardia Civil mantenían contacto a través de Internet con otro terrorista que abandonó España para desplazarse a Siria, según han informado a Europa Press fuentes de la lucha antiterrorista. Las Fuerzas de Seguridad tienen contabilizados a al menos 130 personas que abandonaron el territorio español para hacer la yihad en el extranjero.

Los arrestados son dos personas de origen marroquí llamados Zayd Nocou y Zayd Asawi. El primero de ellos llevaba en España desde los 10 años y ya tenía la nacionalidad y DNI español. De profesión era tornero y está casado y tiene varios hijos.

Ambos han sido detenidos por dedicarse a realizar labores de proseletismo y captación de yihadistas y, según las fuentes consultadas, realizaban reuniones con más gente en las que consumían y visualizaban propaganda y material de corte radical procedente de los territorios que controla el autodenominado Estado Islámico.

Las fuentes consultadas precisan que estas sesiones las realizaban en una de las dos mezquitas que hay en Cornellá del Llobregat (Barcelona).

No es extraño que en una misma mezquita concurra gente de distinta sensibilidad y con distintas formas de entender el Islam, algunos con un corte más radical o salafista. Cuando se produce un enfrentamiento entre dos sectores en un mismo lugar de culto, se dan casos en los que se separan y fundan otra mezquita.

La operación de este miércoles es la tercera fase de dos anteriores de características similares y en los registros los agentes de la Guardia Civil se han incautado de numeroso material informático, móviles y pendrives.

Los expertos del Instituto Armado van a proceder a su estudio dado que los arrestados mantenían una prolífica comunicación a través de las redes.

Además de los detenidos, la Guardia Civil tiene previsto tomar declaración a las personas que conocían la forma de vida de Zayd Nocou y Zayd Asawi.

Cuando los agentes se llevaban arrestados a los dos presuntos yihadistas, la gente que se ha congregado en el lugar de las detenciones han proferido gritos en contra de los arrestados y a favor de la Guardia Civil.