Detenido en Budapest el director español de cine porno Pablo Lapiedra, reclamado por Colombia por filmar a menores

La Audiencia Nacional ordenó el pasado 20 de diciembre la busca y captura de Lapiedra después de que no se presentara ante la Sección Tercera de la Sala de lo Penal para que le comunicaran la decisión del Pleno de ratificar su extradición al país sudamericano para ser investigado en este procedimiento.

El director de cine porno, imputado por un delito de pornografía con menores castigado con penas de entre 8 y 12 años de cárcel, no se presentó a la vistilla del artículo 505 del Código Penal en la que iba a ser formalmente informado de su extradición, lo que obligó a la Sección a dictar una orden de detención.

Fuentes jurídicas, sin embargo, explicaron que esta orden sólo afectaba al ámbito nacional, por lo que Lapiedra ha sido arrestado en virtud de la orden de búsqueda y captura internacional que dictaron las autoridades de Colombia, que deberán pedir ahora la entrega a la Justicia húngara sin que el imputado tenga que volver a comparecer en la Audiencia Nacional.

Los 16 magistrados del Pleno de la Sala de lo Penal indicaban en su auto que Lapiedra había demostrado que no tenía "voluntad de someterse a la jurisdicción colombiana" ni tampoco "de resolver su situación de cualquier otra forma". "El recurrente se encuentra objetivamente refugiado en España frente a las pretensiones de la justicia de Colombia", sostenían.

PENSABA QUE NO ERAN MENORES

En la vista de extradición Lapiedra aseguró que pensaba que la menor que participaba en sus películas tenía más de 18 años, ya que le mostró para cumplimentar su contrato un documento de identidad en el que se acreditaba su mayoría de edad.

El tipo penal equivalente en España es el de pornografía infantil, castigado con entre 5 y 9 años de cárcel que puede alcanzar la pena máxima si el tribunal considera el carácter degradante o vejatorio en los hechos juzgados.

Lapiedra fue arrestado por estos hechos el pasado 17 de marzo en Barcelona por agentes de la Brigada de Investigación Tecnológica del Cuerpo Nacional de Policía en cumplimiento de una orden librada por Interpol y quedó posteriormente en libertad previo pago de una fianza.

Las autoridades colombianas investigaban al director desde 2008, después de que el rector de un instituto de Medellín interpusiera una denuncia porque una alumna aparecía en un vídeo pornográfico. Tras seguir la pista de esta grabación llegaron hasta Lapiedra y su mujer, que trabaja como actriz porno. Después constataron que ambos residen en Madrid y que ella aparecía en algunas de las filmaciones.

Una de las supuestas víctimas explicó en su declaración que grababan películas durante horas, desde las ocho de la mañana a las siete de la tarde, le pagaron 700 euros y que le aseguraron que los vídeos no se distribuirían en Colombia.