Erkoreka cree que "la recesión está cantada" con la prórroga presupuestaria y "la motosierra" en el gasto público

El portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, cree que "la recesión está cantada" con las medidas anunciadas por el Gobierno de Mariano Rajoy, como la prórroga presupuestaria y "la motosierra" que se aplicará al gasto público, sobre todo, en Fomento y en I+D+i, "necesarios para favorecer el crecimiento de economía".

El dirigente jeltzale afirma que estas medidas, sumadas al aumento de los impuestos, harán que el crecimiento económico sea, "a corto plazo, una quimera", y por tanto, no habrá aumento del empleo.

En su último post de su blog, titulado "La primera en la frente", Erkoreka recuerda que hace unos meses, antes de la última campaña electoral, advirtió de que, "una vez celebrados los comicios y constituído el Gobierno que saliera de las urnas", iba a haber "una rigurosísima política de ajuste y recortes".

En este sentido, señala que "era la época en la que un PP altruista, generoso y refractario a los recortes sociales, caricaturizaba a Rubalcaba con el apelativo de 'Alfredo Manostijeras', y éste prometía que, si los socialistas ganaban las elecciones, iban a subir las pensiones y el sueldo de los funcionarios".

"Pues ya ven, la primera en la frente. Nada más constituirse, el Gobierno de Rajoy ha aprobado un paquete de medidas para la prórroga presupuestaria que, si no han generado un colapso colectivo, es porque la inconsciente algarada del fin de año ha contribuido a poner vaselina a la noticia", ha destacado.

Además, ha precisado que "el gasto público se ve sometido a los implacables efectos de la motosierra", entre otros, en aquellos capítulos "que más necesarios resultan para favorecer el crecimiento de la economía: Fomento e I+D+i".

"Con estos mimbres, la recesión está cantada. Pero es que, además, se incrementan los impuestos: el IRPF, en todos los escalones de la tabla, las rentas de capital y el IBI, con lo que la capacidad de gasto de los ciudadanos disminuirá un poco más y se acentuará la contracción del mercado interior", manifiesta.

Por ello, considera que, "con estas medidas, el crecimiento económico se sitúa, al menos a corto plazo, en el terreno de la quimera". "Y si no hay crecimiento, no hay empleo. Es de cajón", afirma.

Tras preguntarse si generarán las medidas del Ejecutivo de Rajoy "la confianza necesaria para que aflore el crédito que lleva años recluido", ha apuntado que "nadie lo sabe ni se atreverá a jugarse su hacienda en ello". "Aparentemente sí porque, según se nos dice, lo que preocupa a los mercados es la inabarcable envergadura que han alcanzado déficit y la deuda pública", añade.

A su juicio, el problema es que "los mismos mercados que obligan a idolatrar el equilibrio presupuestario, exigen, también, solvencia económica de cara al futuro porque quieren cobrar hoy, pero no por ello, dejar de seguir cobrando mañana".

"Y si el ajuste entre los ingresos y los gastos se produce a costa del crecimiento, resulta imposible garantizar la solvencia a medio y largo plazo", indica.

TIEMPOS "DUROS"

El dirigente jeltzale destaca que "una buena parte de los ciudadanos ha empezado a asumir ya que, tanto el año que comienza como el siguiente, serán muy duros desde el punto de vista económico".

"Lo están escuchando con tanta insistencia en todos los medios de comunicación, que han acabado resignándose a ello. Los que votaron a Rajoy lo daban por descontado desde el momento mismo en el que decidieron prestarle su apoyo en las urnas. Y me temo que, los que no lo hicieron, se han ido acomodando poco a poco a esta idea"

Josu Erkoreka destaca que "unos confían en que la austeridad y los rigores del próximo bienio no son más que el imprescindible tributo" que se ha de "satisfacer para garantizar la prosperidad futura", y piensan "que el sacrificio de hoy será el que abra la puerta a las satisfacciones de mañana, dispuestos a perder ahora para ganar después".

"Pero otros sospechan que estas medidas son el preámbulo de una nueva era en la que las clases medias y los sectores más desfavorecidos de la sociedad no harán más que descender y descender hasta acariciar la indigencia. Y se imaginan un escenario crecientemente oscuro, al que desean enfrentarse con crudeza desde este mismo momento", añade.

En su opinión, estos dos colectivos "van a ser, de un modo resumido, los que van a protagonizar el debate social de los próximos años". "Los que se avienen a ceder ahora para afianzar el futuro y los que creen que el futuro es hoy y lo que no se dé ahora, tampoco se dará después", ha manifestado.

Además, se ha referido a "los que nunca corren peligro alguno, los que, cuando el nivel del agua está a punto de alcanzar las vías respiratorias de la gran masa, no sienten más que una ligera sensación de humedad en las plantas de los pies".

"Éstos influirán, sin duda, en el debate social, manipulando y trasegando, con arreglo a su interés, los datos, las noticias y la información publicada. Pero no lo harán con la misma pasión que los demás porque no es lo mismo ahogarse que mojarse los pies", ha concluido.