Feijóo reivindica la cooperación de Galicia y Uruguay y agradece a Mujica la mano tendida

El jefe del Ejecutivo gallego, Alberto Núñez Feijóo, ha agradecido este lunes la mano tendida del presidente de Uruguay, José Mujica, para emprender nuevos proyectos comunes que permitirán revalidar el "éxito" que la "colaboración pasada" supuso para Galicia y para el país suramericano.

Así lo ha manifestado, un día después de firmar un convenio de cooperación con el presidente uruguayo para dar estabilidad a sectores como el naval o las renovables. Lo ha hecho en el acto de inauguración de la plaza dedicada al país suramericano en la capital gallega y al busto de su prócer, José Gervasio Artigas.

Ante un nutrido grupo de uruguayos residentes en Galicia, Núñez Feijóo ha subrayado que, una vez más, Galicia encuentra "abiertas" las puertas de este país "para desarrollar un potencial industrial y comercial que llega aquí con los obstáculos de una dura crisis económica y que precisa de los mercados exteriores para superarla".

En la misma línea y ante numerosas autoridades como el delegado del Gobierno en la comunidad, Samuel Juárez; la jefa del Legislativo gallego, Pilar Rojo; y el secretario xeral de Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, Feijóo ha añadido que Uruguay vuelve a contar con Galicia como "aliado estratégico" para desarrollar el "pujante" crecimiento en el que está inmerso.

No en vano, ha destacado que los gallegos que emigraron a América construyeron "un puente invisible, pero de sólidos pilares que cruza el Atlántico de orilla a orilla". Un puente por el que circularon durante décadas "oportunidades económicas, cultura, educación, arte" y, en definitiva, "esperanza y progreso" para esta tierra.

"Por ese puente cruzó el espíritu de la galleguidad, se mantuvo y se volvió universal", ha aseverado, antes de incidir en que los gallegos contaron en su empresa con "las gentes generosas y hospitalarias" que en el nuevo continente al que llegaban "los trataron como iguales y les abrieron las puertas de par en par".

UNA "LECCIÓN CÍVICA"

En su intervención, Núñez Feijóo ha rememorado como la "aventura desesperada" de los compatriotas gallegos encontró en Uruguay el territorio "idóneo" para desarrollarse y ha resaltado la acogida que ese país dispensó a los emigrantes, convencido de que entraña una "lección cívica" aún vigente a día de hoy.

"Mucho antes de que se teorizara sobre la globalización, uruguayos y gallegos demostraron con hechos lo que significa sumar", ha sentenciado, antes de afirmar que Galicia y Uruguay protagonizaron una integración "armónica" que contribuyó al desarrollo de ambos territorios y abrió una vía para "canalizar la necesidad" de Europa y América de relacionarse.

En este escenario, se ha reafirmado en que ese "puente" que tendieron los antepasados sigue "abierto al tráfico". "Y aunque el escenario es muy distinto al que propició su construcción, ambos, Galicia y Uruguay, seguimos necesitando sus servicios", ha apostillado.

PLAZA DE URUGUAY

Antes de la ofrenda floral que José Mujica realizó ante el busto de Artigas, Feijóo ha reivindicado la importancia histórica de los lazos que unen Galicia y Uruguay y se ha declarado muy satisfecho por poder contar con la presencia del presidente de este país para inaugurar la nueva plaza compostelana.

Con este gesto, ha explicado que se pretende "corresponder" desde la capital gallega a "aquel generoso regalo" de Montevideo a los emigrantes, que fue la Plaza de Galicia inaugurada por el fallecido presidente Manuel Fraga en la capital uruguaya en el año 2002.

"Somos pueblos hermanos que compartimos pasado, presente y futuro. Compartimos historia, compartimos cultura y compartimos también los símbolos", ha subrayado el mandatario autonómico, que también ha buscado puntos de encuentro entre Rosalía de Castro y José Gervasio Artigas, al afirmar que ambos "contribuyeron a desvelar el código que cifra las identidades" de sus respectivos territorios.

"Sumamos, pues, al prócer uruguayo a nuestros referentes y asumimos el ejemplo de los valores que representa", ha sentenciado Feijóo, mientras que Mujica ha erigido a Artigas en "más que un uruguayo", ya que le ha definido como "el primer libertador de la independencia latinoamericana" y "un héroe moderno del republicanismo".

Antes de Feijóo y Mujica, que también ha reivindicado los lazos comunes de gallegos y uruguayos, intervino el alcalde de Santiago, Ángel Currás, quien también ha pronunciado un discurso institucional asentado en la voluntad de cooperación de la capital gallega con las instituciones uruguayas.

MUESTRAS DE CARIÑO A MUJICA

Una de las anécdotas del acto, que se prolongó durante alrededor de una hora y en el que participaron numerosas autoridades autonómicas y de la capital gallega, la ha protagonizado, precisamente, Ángel Currás, que, en un momento de su intervención, se confundió y aludió a Paraguay en vez de Uruguay, lapsus por el que, casi a renglón seguido, se ha disculpado.

Hasta la recién inaugurada Plaza de Uruguay se trasladaron en torno a medio centenar de compatriotas de Mujica, que protagonizaron numerosas muestras de cariño hacia el presidente, con el que varios asistentes se sacaron una fotografía entre proclamas de "ilustre" y "transparente". "¡Todo el mundo te quiere, Pepe", proclamó uno de los asistentes.

PROTESTA POR LAS PREFERENTES

Frente a estas muestras de cariño, los gritos de un reducido grupo de afectados por las participaciones preferentes, que no llegaban a la decena, han marcado el acto, en el que recibieron a las autoridades gallegas, entre gritos de "corruptos y ladrones" y pancartas dirigidas a los populares con el lema de 'Si el PP nos mete la quita, nosotros les sacamos los votos'.

En medio de un amplio despliegue policial, los manifestantes lograron que sus consignas se escuchasen por encima de los himnos uruguayo y español que sonaron antes de las intervenciones y de la ofrenda floral. "No hay pan para tanto chorizo" y "ladrones" fueron los lemas más coreados, mientras que algunos asistentes se quejaron a los agentes por su decisión de apartar al grupo de manifestantes.

Estos, por su parte, incrementaron sus gritos hacia el final del acto, mientras acusaban a los agentes de "proteger a delincuentes". En el transcurso de su protesta, según explicaron posteriormente a los medios de comunicación los manifestantes, fueron identificados y una mujer abandonó la nueva Plaza de Uruguay en coche patrulla.

Ya con los ánimos muy caldeados, mientras abandonaban el acto las autoridades y se escuchaban los últimos gritos de "Currás, imputado", un portavoz de los afectados aseguraba que no tenía "ni para comer" y advertía que, de no habilitar una solución para que recuperen sus ahorros, "habrá sangre".