López dice que el rescate no es "una buena noticia" y pide que las ayudas sean "transparentes" y condicionadas

El lehendakari Patxi López afirma que el rescate a la banca española no es "una buena noticia" y ha mostrado la disposición de su Gobierno a "colaborar" ante esta situación "difícil". Asimismo, ha reclamado que se "analicen responsabilidades" y que "las ayudas a las entidades sean "transparentes" y "condicionadas", con garantías de que sean devueltas y de que sirvan para "abrir el grifo" del crédito.

En la localidad vizcaína de Barakaldo, donde se ha desplazado para visitar el bloque quirúrgico de Neurocirugía y Raquis Medular del Hospital Universitario de Cruces, el presidente vasco ha asegurado que, "por mucho que se quiera contar de otra manera, no estamos ante una buena noticia, primero por lo que significa en sí misma, que España tiene que pedir ayuda para resolver los problemas de algunas de sus entidades financieras".

Asimismo, ha advertido de las "derivadas" que el rescate a los bancos tiene, porque "con esto se pierde margen de maniobra y vamos a estar más limitados, condicionados y más tutelados por quienes nos prestan el dinero, que van a imponer condiciones para ello".

Además, ha señalado que se trata de un dinero "que se presta al Estado, con lo que aumenta de una forma considerable nuestra deuda pública y, por lo tanto, repercutirá en las condiciones que tenemos que cumplir para asegurar el cumplimiento del control del déficit".

El lehendakari ha asegurado que estamos ante un "problema serio" y una "situación difícil a la que todos debemos responder, porque nos afecta a todos sin excepción, a España, a Europa y a Euskadi".

En su opinión, es necesario aplicar "criterios acertados, ser capaces de convertir este esfuerzo colectivo en una especie de fuerza anticrisis". "Hay que salvar y sanear nuestro sistema financiero, saneando los bancos que estén en dificultades, pero este no debe de ser un objetivo aislado, sino que debe de servir para ayudar a la economía en su conjunto", ha subrayado.

López ha dicho que "hay que hacer un esfuerzo para sanear la banca española", pero ha advertido de que "si el objetivo final no es ayudar a la economía, a las empresas y a las familias, seguramente no habrá servido para mucho".

Por ello, ha insistido en la necesidad de que "todos" hagan "un esfuerzo de colaboración para hacer frente a esta situación" y ha señalado que Euskadi, "a pesar de que su sistema financiero, Kutxabank como caja de referencia no tiene problemas ni necesita ayudas porque es una caja solvente que ha sido bien gestionada, Euskadi y el Gobierno vasco está dispuesto a colaborar en este transito".

Para López, "hay que saber qué ha pasado, analizar responsabilidades" porque esta "crisis bancaria no puede ser pagada, una vez más, por los trabajadores o las clases medias, que son los principales perjudicados". Tras reconocer que la banca "tiene que buscar la confianza de los mercados", ha añadido que también tiene que buscar "la confianza de la ciudadanía, que es la que soporta lo que está pasando".

"Es absolutamente necesario que nos expliquen, sin ocultar ninguna información, qué es lo que ha sucedido", ha insistido, para advertir de que las ayudas deben ser "transparentes" y "el dinero público debe tener control público", por lo que el hecho de que sean bancos privados "no es ninguna excusa, porque si se utilizan fondos públicos se tiene que asumir algún tipo de control público".

"QUE NO SEA UN CASTIGO"

El lehendakari ha añadido que dar ayudas a entidades que necesitan financiación "no puede ser un castigo para las entidades que han sabido gestionar de forma responsable y solvente su actividad". "No podemos permitir que se castigue reduciendo su competitividad a las entidades que han sido bien gestionadas para primar a las malas", ha subrayado.

Además, ha considerado que las ayudas deben ser "condicionadas, tienen que servir para ayudas a las empresas y familias, especialmente a las familias que no pueden pagar su hipoteca y a las personas que han quedado amarradas a las opciones preferentes".

"No podemos permitir que mientras se utilizan estas ayudas para cubrir el enorme agujero que han provocado sus actividades inmobiliarias en los bancos se desahucie a las familias que no pueden pagar su hipoteca, por lo que hay que buscar fórmulas también para resolver esta situación", ha señalado López.

En ese sentido, ha afirmado que estas ayudas "deben estar condicionadas también a dotar a las entidades financieras, pero, sobre todo, a reactivar la economía real, es decir, tienen que abrir el grifo de los créditos a las empresas y a las familias".

El lehendakari ha reclamado "garantías razonables de que estos recursos van a ser devueltos a las arcas públicas y financiados por los ciudadanos como pérdidas futuras".

"RESCATE"

López, que no ha querido "entrar en la polémica" sobre la utilización del término "rescate", ha señalado que "lo que se hace es conceder una ayuda a España para resolver los problemas de algunas de sus entidades financieras" y "la palabra es lo de menos, lo que es realidad es que España ha tenido que pedir ayuda para resolver este problema y que esta ayuda tiene una serie de condicionantes que debiéramos de resolver cuanto antes".

El lehendakari ha considerado necesario un "cambio radical en las políticas en Europa y en España para acercarse más a lo que estamos haciendo en Euskadi". A su juicio, es preciso "dar un impulso al crecimiento económico, a la generación de empleo, que es nuestro gran problema, por lo que tenemos que ser capaces de utilizar recursos para impulsar el crecimiento económico".

"Tenemos que invertir, apostar por la I+D+i, buscar la internacionalización de nuestra economía, un cambio de modelo en el conjunto de España. Eso es lo que estamos haciendo en Euskadi y funciona", ha destacado, para añadir que el Gobierno de España "debe de entender, de una vez por todas, que sólo con los recortes no solo no salimos de esta sino que estamos agravando nuestra situación".

Por último, ha rechazado que el rescate de España perjudique al "modelo de Euskadi" y ha asegurado que van a seguir "apostando por lo mismo, buscando eficiencias y ahorros, no a través de los recortes sino de mejorar la productividad incluso de los servicios públicos".

COMUNIDADES AUTÓNOMAS

En cuanto al resto de comunidades autónomas, López ha recordado que con "el déficit que conocimos la última vez, comprobamos que algunas comunidades nos habían estado engañando, aparecían como los campeones del mundo en el control del déficit cuando tenían facturas en el cajón y algunos agujeros no confesados y, cuando se confiesan, no solo no son los campeones del mundo, sino que han sido los campeones del mundo de los recortes".

El lehendakari ha confiado en que "todas las comunidades hayan aclarado bien cuáles son sus cuentas reales y, a partir de ahí, empiecen a trabajar para controlar su déficit y para impulsar sus economías". "Yo sólo puede hablar de Euskadi, que no tiene ninguna factura en el cajón oculto ni ningún agujero oculto", ha concluido.