Militares heridos en Irak, Afganistán, atentados de ETA, el 11-M y en ejercicios, entre los ascendidos honoríficamente

El Gobierno ha aprobado este viernes el ascenso honorífico de 28 militares heridos graves en actos de servicio dentro y fuera de España, una medida que, aunque prevista por la Ley de la Carrera Militar, hasta ahora se había reservado para fallecidos. Entre los beneficiados hay militares heridos en Irak y Afganistán, en atentados de ETA y en los atentados del 11 de marzo de 2004, así como en ejercicios y maniobras.

En concreto, hay cinco militares heridos en misiones en el exterior, en Irak y Afganistán, que van desde febrero de 2004 a junio de 2011. En concreto, se trata del teniente Agustín Gras (que pasa a capitán) y la cabo Jenyfer García (que pasa a cabo primero), heridos en Afganistán en junio de 2011, cuando un artefacto explosivo estalló al paso del vehículo Lince en el que se encontraban.

También ascienden el sargento Gonzalo Miguélez (ahora brigada) y el cabo Antonio Cures (a cabo primero), que resultaron heridos en otro atentado ocurrido en Afganistán, en noviembre de 2008, cuando un vehículo suicida se empotró contra el BMR en el que se encontraban, provocando también la muerte a dos militares españoles.

Finalmente, también ha recibido este reconocimiento el sargento Sergio Santisteban, ascendido a sargento primero, y que sufrió heridas en Diwaniya (Irak), en la explosión de un artefacto lanzado contra su patrulla desde un edificio. Santisteban pasó a la situación de retiro en 2006 por heridas "en acto de servicio", el pasado febrero se le reconoció que sus lesiones corresponden a "atentado terrorista".

Además, hay otros 13 ascensos a militares heridos en atentados terroristas en territorio nacional. Entre ellos, hay ocho militares que sufrieron heridas en la explosión de un coche bomba al paso de un autobús que se dirigía a la Academia Militar de Zaragoza, en 30 enero de 1987.

OCHO MILITARES HERIDOS POR ATENTADO DE ETA EN ZARAGOZA

Se trata del subteniente José Marco (pasa a suboficial Mayor); el teniente coronel Marcos Conde (asciende a coronel); el comandante Abundio Tapia (asciende a teniente coronel); el comandante Enrique Alcaide (asciende a teniente coronel); el comandante Jerónimo Tavira (asciende a teniente coronel); el capitán Manuel Melo (asciende a comandante); el capitán Francisco Navarro (asciende a comandante) y el sargento primero José Doñate (asciende a brigada).

El caso más antiguo es el del guardia real Pedro López, que asciende a cabo, que sufrió heridas en un atentado ocurrido en Madrid el 17 de mayo de 1981, cuando miembros de ETA colocaron un paquete bomba en el techo del vehículo oficial del teniente general Valenzuela, del que el militar herido era escolta.

Asimismo, ha ascendido a sargento primero el sargento Joaquín Bordonaba, que sufrió heridas graves en la explosión de una carta bomba que remitió ETA a su nombre en la unidad a la que pertenecía en Jaca (Zaragoza). También integra esta lista el comandante Buenaventura Martín (pasa a teniente coronel), herido en Madrid en diciembre de 1989 cuando unos terroristas tirotearon al comandante que le acompañaba en la plaza de Mariano de Cavia.

Y finalmente, han ascendido a teniente coronel y a comandante, respectivamente, el comandante Francisco Javier Gismero y el capitán Gonzalo Villamarín, heridos de carácter grave en el atentado terrorista del 11 de marzo de 2004 en Madrid, cuando se dirigían a su destino.

Al margen de estos 18 ascensos, también se ha reconocido a otros diez militares retirados con incapacidad permantente por heridas en acto de servicio en diferentes circunstancias, según los datos a los que ha tenido acceso Europa Press.

Los casos más antiguos son los del cabo Francisco Moral (que pasa a cabo primero), herido en junio de 1980 en un incidente con un arma de fuego y el teniente Juan León (asciende a capitán), que, en enero de 1981, protegió a unos reclutas a los que instruía de una la explosión de una granada que se activó de manera fortuito, cubriendo con su cuerpo el artefacto contra una pared y sufriendo graves heridas en las manos y la cara.

Otros casos son los del brigada Victoriano Raso, que pasa a subteniente, y que permaneció en servicio activo a pesar de contar con graves lesiones en su espalda; el soldado Daniel Muñoz (asciende a cabo), que sufrió un disparo accidental en 2002; y el del teniente de navío Antonio Baz, pasa a capitán de corbeta, que sufrió un accidnete de helicóptero mientras participaba en la operación 'Centinela Gallego'.

También ha recibido este reconocimiento la capitán Raquel Montero (asciende a comandante), que contrajo una grave enfermedad mientras trabajaba como sanitaria en Afganistán.

Asimismo, han ascendido a cabo el soldado Alejandro Clemente y a sargento primero el sargento Angel Morga, quienes sufrieron graves accidentes mientras realizaban prácticas de salto en paracaídas en 2007 y 2008, respectivamente.

Completan la lista el subteniente Antonio Suárez (pasa a suboficial mayor) y el cabo primero Froilán Rivero (asciende a cabo Mayor). El primero de ellos sufrió heridas graves en 2008, cuando fue golpeado con una hélice en el aeródromo militar de León, mientras que el segundo sufrió un accidente durante un vuelo de instrucción en un helicóptero.