Montilla anuncia que abandonará el liderazgo del PSC en su próximo congreso

Así lo ha anunciado Montilla en una breve comparecencia tras la debacle sufrida por el PSC en las elecciones autonómicas, en las que ha obtenido los peores resultados de su historia, al lograr 28 diputados con el 99% de los votos escrutados, nueve menos que los 37 actuales.

Hasta ahora, los peores resultados de la formación se remontaban al año 1980, cuando, bajo el liderazgo de Joan Reventós, el PSC logró 33 escaños en el Parlament.

Montilla, arropado por todos los dirigentes socialistas, ha asegurado que estos resultados, han de abrir un proceso de reflexión en el partido, que deberá impulsar asimismo "cambios internos" y renovar su "proyecto político, lejos de nostalgias e inercias".

El líder del PSC anunció durante la campaña electoral que esta era la última vez que concurría a las elecciones autonómicas.

Pero el descalabro sufrido en los comicios, mucho peor de lo que pronosticaban las encuestas preelectorales, ha precipitado los acontecimientos y le ha llevado hoy a anunciar que en el próximo congreso del PSC tampoco volverá a optar a la secretaría del partido.

Fuentes socialistas han indicado a Efe que no se descarta avanzar este congreso a junio de 2011, después de las municipales de mayo, aunque también está en las previsiones posibles apurar los plazos a junio de 2012, dependiendo del calendario electoral por las elecciones generales.

Con un gesto muy serio y visiblemente emocionado, Montilla ha comparecido ante los medios de comunicación sobre las 22.30 horas para agradecer a los ciudadanos el apoyo recibido, asumir la derrota socialista y felicitar a CiU, a cuyo líder, Artur Mas, ha telefoneado para felicitarle personalmente.

"Los ciudadanos han hablado, los socialistas hemos sido derrotados y nuestros adversarios, a los que felicito, han obtenido una amplia victoria", ha manifestado, antes de agregar: "Hemos perdido unas elecciones, pero no hemos sido derrotados en nuestras convicciones, que siguen vivas en todos y cada uno de nosotros".

Montilla ha asumido que el PSC pasará a la oposición tras siete años de gobierno, primero bajo la presidencia de Pasqual Maragall y después de él, tras enterrar la fórmula del tripartito y rechazar cualquier pacto con ERC y PP.

"Corresponderá a Mas formar gobierno, como le he dicho por teléfono hace unos momentos, y le deseo el máximo acierto para afrontar la difícil situación económica", ha apuntado.

El revés electoral y la futura marcha de Montilla abren en el PSC el debate sucesorio no sólo en el cartel electoral -ya dijo Montilla que ésta era la última vez que se presentaba- sino también en el liderazgo del partido.

Sin referirse a ello, Montilla ha remarcado que lo que procede ahora es "reflexionar" sobre lo sucedido en los comicios y abrir "un proceso de cambios" para responder a las demandas de la sociedad catalana.

"Tenemos que construir una alternativa al nuevo gobierno, controlando su acción y colaborando en la lucha contra la crisis en coherencia con lo que hemos planteado a lo largo de la campaña", ha asegurado, tendiendo de esta manera su mano a CiU, el gran vencedor de estas elecciones, al obtener 62 diputados.

El líder socialista, que ha sido recibido por una fuerte ovación a su entrada en la sala de prensa de la tercera planta de la sede de la calle Nicaragua, ha destacado que la "profunda reflexión" que ha de hacer el partido ha de ser "con la máxima apertura de miras", un proceso, ha dicho, del que quiere ser "impulsor y garante".

"Ha de constituir el núcleo de mis dedicaciones en el futuro próximo", ha señalado.

Poniéndose al servicio del partido y de los votantes socialistas, ha concluido: "Personalmente no tengo más que palabras de agradecimiento para los electores socialistas y la militancia del partido. Estaré en el lugar que corresponda y que mejor sirva a los intereses y valores por los que he trabajado toda la vida".