(Resumen) Puigdemont y Millo se emplazan a concretar el diálogo pero chocan por el referéndum

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y el delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo, se han emplazado este viernes a que las apelaciones al diálogo que se han hecho las dos administraciones se concreten con hechos concretos en los próximos meses.

Tras una reunión de dos horas en el Palau de la Generalitat, se ha evidenciado que la voluntad de dialogar de la dos administraciones choca de nuevo en el mismo punto: el Govern quiere negociar un referéndum y el Gobierno central replica que negocia cuestiones que están fuera de la ley.

La portavoz del Govern, Neus Munté, ha sido la encargada de ofrecer la posición de Puigdemont asegurando que el presidente le ha trasladado a Millo que no considerará sincera la oferta de diálogo hasta que Rajoy ofrezca "hechos concretos".

"De diálogo está bien hablar pero lo que es mejor es practicarlo y en estos momentos no podemos acreditar que haya una oferta en firme sino muchas apelaciones", ha precisado Munté, que ha recordado que el Govern presentó a Rajoy un listado de 46 demandas que no se han cumplido.

Entre estas demandas está pactar un referéndum sobre la independencia de Cataluña y ha recalcado que no la piensa retirar para facilitar un acercamiento con Rajoy: "Nuestra voluntad es hablar de todo sin límites ni líneas rojas de ningún tipo".

SENSACIÓN DE "MANO TENDIDA"

Millo ha salido de la reunión "con la sensación personal de que (Puigdemont) acepta la mano tendida" al diálogo, y apuesta por priorizar aquellos temas en los que puede haber acuerdo, lo que implica dejar en último término el referéndum.

Por eso, ha acudido a la cita con la lista de 46 demandas que le trasladó Puigdemont al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y ha propuesto empezar a dialogar sobre ellas con lealtad y sinceridad.

Millo quiere abordar cuanto antes aquellos temas "en los que sí puede haber acuerdo", porque tratar de hablar primero sobre un tema como el referéndum, en el que el desencuentro es total, no facilitará las relaciones, ha avisado.

Considera que, si hay diálogo y acuerdos sobre los 46 puntos, se solucionará el encaje de Cataluña en España y no será necesario hablar de referéndum, y detalla que tanto él como Puigdemont consideran "que entre todos hay que hacer esfuerzos para reducir los litigios".

Para eso es importante potenciar instrumentos de negociación como las conferencias sectoriales y la comisión bilateral Estado-Generalitat --desde hace años desactivada--, aunque ha precisado que los temas que ya están judicializados "deben seguir su curso".

También le ha pedido a Puigdemont que se replantee su ausencia en la conferencia de presidentes autonómicos y acuda para que la voz de los catalanes tenga representación.

FUTURAS REUNIONES

El presidente catalán le ha reiterado los motivos por los que no acudirá a la conferencia de presidentes autonómicos que prevé convocar Rajoy, y le ha insistido en que la Generalitat demanda una relación "bilateral" con el Estado y no una compartida con las otras autonomías.

Munté ha precisado que en la reunión en ningún caso han entrado en negociaciones concretas, algo que la Generalitat espera hacer en las futuras reuniones entre el vicepresidente Oriol Junqueras y la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, y entre Puigdemont y Rajoy --ambas, pendientes de concretar--.