Lo ha dicho este viernes en un apunte en las redes sociales recogido por Europa Press, después de que Serra, Adolf Todó y otros 52 exdirectivos de Caixa Catalunya en 2010 hayan sido imputados por cobros "desproporcionados".
"Muy enojado. Si se demuestran, estas sí que son actitudes incompatibles con la militancia socialista", ha considerado el dirigente del PSC.