De la Torre, el autor de la frase "tarjetas black" aclara que no eran una "retribución"

Muchos de los acusados en el juicio de las tarjetas opacas de Caja Madrid han señalado durante el proceso a Enrique de la Torre como la persona que entregaba los 'plásticos' y daba las instrucciones de que podían gastarlos en lo que quisieran. Un extremo que él niega: "Yo no daba instrucciones a nadie y menos a los miembros del Consejo. Las tarjetas de los consejeros eran para gastos de representación, en ningún caso tuvieron un carácter salarial". El exsecretario de Caja Madrid ha citado nombres en concreto. Mintió, dice de la Torre, Arturo Fernández cuando declaró que él le entregó la tarjeta y que le aseguró que era para gastos personales. Tampoco se la dió al que fuera 'mano derecha' de Cristóbal Montoro en Hacienda, Estanislao Rodríguez Ponga. Ni le dijo que podía gastárselo en lo que quisiera porque el dinero era suyo. Por eso cuando el fiscal le ha mostrado una de las pruebas del juicio, el correo donde él habla de 'tarjetas black', De la Torre explica sin inmutarse que eran neutrales a efectos fiscales porque al ser tarjetas de representación se las deducía la caja en el impuesto de sociedades y no el beneficiario en el IRPF. Quienes sí tenían, dice de la Torre, tarjetas para uso personal eran los directivos.