Valderas ve "margen de maniobra" para que el plan de ajuste andaluz tenga "menor incidencia" en los salarios públicos

El vicepresidente de la Junta de Andalucía y consejero de Administración Local y Relaciones Institucionales, Diego Valderas, se ha comprometido este miércoles a "intentar que haya una modificación" del capítulo uno del plan de ajuste para que tenga "menor incidencia" en el salario de los funcionarios públicos, ya que se ha mostrado convencido de que "puede haber un margen de maniobra, aunque sea negativo, que tenga un carácter positivo".

Valderas se ha pronunciado de este modo al ser preguntado por la decisión de los sindicatos de abandonar este martes la negociación con la Junta sobre el plan de ajuste en la Mesa de Función Pública.

El vicepresidente andaluz ha asegurado que la "idea clara" de la Junta es "seguir negociando" con los sindicatos, para lo que la titular de Hacienda y Administración Pública, Carmen Martínez Aguayo, ha realizado una nueva convocatoria a la que ha invitado a sumarse a los líderes sindicales, y ha adelantado que "en ese nuevo impulso negociador habrá nuevos elementos encima de la mesa que pueden permitir una negociación más amplia de la que se dio hasta ayer".

"Este vicepresidente va a intentar una modificación del capítulo uno para que haya menor incidencia en el conjunto de los salarios de los funcionarios públicos y estoy convencido de que la consejera de Hacienda está en disposición de situar en el diálogo un margen de maniobra que tenga una carácter positivo", ha añadido Valderas.

Ha defendido que "no se puede tocar a las personas que dentro de la función pública están con un criterio de mileurismo neto" junto a otros criterios como "la reversibilidad y el mantenimiento del empleo" y un nuevo tratamiento para los interinos de sanidad y educación para que "estén en mejores condiciones que lo que en un primer momento se había anunciado".

ESPERA QUE AGUAYO LLEVE LA NEGOCIACIÓN "CON ÉXITO"

Preguntado por si está dispuesto a reunirse con los sindicatos para desbloquear la situación, el vicepresidente ha señalado que la negociación "está en buenas manos" y ha confiado en que Martínez Aguayo la lleve "con éxito" una vez que se abran "nuevos planteamientos" relativos a "no tocar los salarios más débiles, tener otro tratamiento sobre interinidad y el concepto de reversibilidad, para que el derecho revierta cuando la economía mejore".

"Si hay otras alternativas que han pedido sindicatos y las ponen encima de la mesa, el Gobierno quiere tratarlas", ha dejado claro Valderas, que ha advertido de que, en caso de que "se rompa la baraja, hay una responsabilidad del Consejo de Gobierno de presentar un decreto, que tenemos la convicción que tiene que tener tratamiento de ley, y que permita que en el Parlamento lo que el gobierno haya hecho pueda ser mejorado".

El también líder andaluz de IU ha confiado en que la nueva fase de diálogo que puede abrirse antes de la aprobación del plan de ajuste en el Consejo de Gobierno, al que no ha rehusado "poner fecha", permita un "cierto compromiso" entre Junta y sindicatos y ha apuntado que, en caso contrario, restará el trámite parlamentario donde "los grupos escucharán lo que digan las centrales sindicales".

En este sentido, se ha mostrado convencido de que "el primer avance que seamos capaces de dar desde el gobierno mejorará el inicio del conocimiento de un plan que no será el mismo el que llegue al Parlamento" y ha añadido que "a partir de ahí los grupos parlamentarios tienen que seguir mejorando lo que venga mejorado del Gobierno, pero que todavía podría tener algunos empujes en el debate parlamentario".

"LOS RECORTES SON IMPUESTOS POR EL GOBIERNO"

Valderas ha trasladado a los sindicatos la "necesidad de diálogo" en "tiempos muy duros y complicados" y ha asegurado que percibe "cierta injusticia cuando se pone el foco en que es la Junta quien hace los recortes", ya que, según ha subrayado, "hay que decirle a la ciudadanía que los presupuestos de Andalucía son una unidad de gasto impuesta desde los Presupuestos Generales del Estado (PGE) y por una política del Gobierno central que imposibilita un campo de maniobra más amplio a la Junta".

En este sentido, ha confiado en que el Senado apruebe una enmienda de IU a los PGE para introducir una "reconsideración de 692 millones sobre la base presupuestaria" para que Andalucía "no se vea tan afectada por las imposiciones" del Gobierno y que permitiría "solucionar mañana mismo el recorte muy doloroso" que se plantea a empleados y funcionarios públicos, por lo que ha pedido a los dirigentes populares Javier Arenas y Antonio Sanz, ambos senadores, que "conduzcan a su partido a aprobarla".