Zapatero trasladó hoy a Durao Barroso la necesidad de agilizar la aplicación de las medidas acordadas por el eurogrupo

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, planteó hoy al presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, la necesidad de agilizar la aplicación de las medidas acordadas en la última reunión del Eurogrupo, celebrada en Bruselas el pasado 21 de julio, según informa Moncloa.

El Ejecutivo explica, tras dispararse la prima de riesgo de la deuda española a los 400 puntos básicos, que los equipos económicos de los distintos Gobiernos europeos coinciden en señalar la necesidad de que, ante la gravedad de esta crisis económica y financiera mundial, los Gobiernos den respuestas conjuntas y unitarias.

Rodríguez Zapatero mantuvo hoy conversaciones con numerosos dirigentes políticos nacionales e internacionales para analizar y compartir reflexiones sobre la evolución de la crisis financiera internacional y la prima de riesgo con el bono alemán.

El presidente ha estado en contacto permanente con la vicepresidenta para Asuntos Económicos y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, quien le ha informado de la interlocución constante de su equipo económico con representantes económicos de varios países europeos, especialmente de Alemania, Francia e Italia.

Elena Salgado informó al presidente del Gobierno que los expertos coinciden en señalar que la actual situación se debe a la crisis financiera que azota la zona euro agravada con la incertidumbre de la situación económica en Estados Unidos.

El presidente del Gobierno mantuvo conversaciones telefónicas a lo largo de la jornada con el líder del PP, Mariano Rajoy; con el candidato del PSOE a las elecciones generales, Alfredo Pérez Rubalcaba; con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y con el resto de portavoces de grupos parlamentarios.

A todos ellos les expresó su preocupación por la situación que vive la economía mundial en estos momentos y las primeras impresiones que trasladan los expertos de los diferentes gobiernos en el sentido de que, a la incertidumbre que vive la zona euro por la crisis griega, se suma ahora otro factor de inestabilidad procedente de Estados Unidos.

No obstante, según Moncloa, dichos expertos coinciden en señalar también que en el mes de agosto se reduce considerablemente el número de operaciones financieras que se realizan en el mercado internacional y que es conveniente y necesario poner cierta perspectiva sobre los acontecimientos inmediatos.