El abogado del Palau cree inconcebible que el Ayuntamiento ignorara la cesión

Según han informado fuentes judiciales, Saura ha declarado hoy como testigo durante cerca de una hora ante la juez que investiga las irregularidades urbanísticas para la construcción del hotel de lujo y ha insistido en que él era un simple asesor del proyecto, de cuya tramitación urbanística estaba encargado el arquitecto Carles Díaz, imputado en la causa.

El letrado, aunque hizo constar en unas alegaciones del expediente urbanístico del proyecto que el titular del solar que debía albergar el hotel era la Fundación Palau de la Música, ha afirmado hoy que era "conocido y notorio" que el proyecto lo promovía un particular.

En ese sentido, ha considerado "inconcebible" que el ex teniente de alcalde de Urbanismo Ramon García-Bragado y el gerente de Urbanismo Ramon Massagué, ambos imputados en la causa acusados de ocultar la operación especulativa que existía tras el proyecto, desconocieran la titularidad de los solares.

No obstante, a preguntas de las defensas de los cargos públicos imputados ha acabado admitiendo que no tenía la certeza de que Massagué y García-Bragado supieran quién era el propietario de las fincas destinadas al proyecto hotelero.

En cualquier caso, ha añadido que, de cara a la tramitación urbanística del proyecto hotelero, era irrelevante la titularidad de los solares, situados junto al Palau de la Música y que una congregación religiosa entregó a la entidad cultural a cambio de unas reformas en sus instalaciones educativas.

Lluís Saura ha recalcado que su intervención en el proceso para la aprobación del proyecto hotelero era la de asesorar en cuestiones jurídicas relacionadas con la tramitación del mismo, por lo que nunca participó en la negociación de los convenios para la construcción del edificio ni en la planificación urbanística.

De acuerdo con su versión, era el ex directivo del Palau Jordi Montull el que le encargaba la supervisión jurídica de los trámites necesarios para sacar adelante el proyecto hotelero, a partir de acuerdos que estaban previamente pactados y en cuyo diseño, ha añadido, él nunca participó.

El asesor jurídico ha señalado que Jordi Montull, que en su declaración como imputado se desvinculó de los trámites del proyecto hotelero, era quien dirigía la operación y estaba en todo momento al corriente de su desarrollo.

Hoy ha declarado también como testigo ante la juez el abogado de la Generalitat Josep Lluís García-Ramírez, que en septiembre de 2009, una vez los vecinos habían denunciado el caso ante la Fiscalía, elaboró un informe sobre la operación para la construcción del hotel de lujo por encargo del Departamento de Economía.

Según fuentes judiciales, el letrado ha mantenido que no se trata de un informe jurídico completo sino de un estudio que se le pidió para que el gabinete de prensa del departamento pudiera contrastar la información publicada por un periódico que cuestionaba la legalidad del proceso urbanístico del hotel.

Ese informe, sin embargo, acabó siendo incorporado en el expediente que la consellería de Economía envío al fiscal de Delitos Urbanísticos, Antoni Pelegrín, cuando éste requirió a la Generalitat información sobre su intervención en el proyecto hotelero, que partió de un convenio entre ese departamento y la Fundación Palau de la Música para la permuta y recalificación de unos terrenos.