Acusaciones y críticas cruzadas para explicar el adiós de Barcelona a la EMA

Que a Barcelona no venga la Agencia Europea de Medicamentos significa que tampoco lo hará una plantilla de más de 900 trabajadores; un organismo que se relaciona 1.600 empresas. No vendrá un presupuesto comunitario de unos 320 millones de euros anuales, y como consecuencia, España no disfrutará del beneficio económico indirecto que todo ello habría supuesto.

Conocida la noticia, Carles Puigdemont culpa al 155, al Gobierno y a su actuación el uno de octubre: “Barcelona era la favorita. Con violencia, retroceso democrático y el 155, el Estado la ha sentenciado”, ha dicho a través de las redes sociales.

Afirmaciones contrarias a lo expresado desde Ciudadanos, que responsabiliza precisamente al independentismo por la derrota: “Este ‘procés’ ha de acabar, porque es lo que nos está generando esta situación”, ha dicho Inés Arrimadas.

Con distintas palabras pero el mismo diagnóstico, el Partido Popular habla de otro golpe a la economía catalana: “El expresidente de la Generalitat, que es un prófugo, no te pone las cosas fáciles”, afirma el líder del PP catalán, Xavier García Albiol.

El PSOE, por su parte, lamenta la decisión y ya: “A partir de ahí yo no quiero buscar responsables políticos, y que cada cual saques sus conclusiones”, ha manifestado Pedro Sánchez que, en este asunto, no baja a la arena de reproches…