El proyecto estrella de la cooperación española lleva agua potable a 3 millones de personas en América Latina

El proyecto estrella de la cooperación española ha llevado agua potable y sistemas de saneamiento a unos tres millones de personas en zonas rurales o de la periferia de las ciudades de la región de América Latina y el Caribe, según estimaciones del Gobierno español.

A pocos meses de que expire el plazo que la comunidad internacional se fijó para reducir la pobreza extrema y el hambre en el mundo en el horizonte de 2015 --los conocidos como Objetivos de Desarrollo del Milenio-- el Ejecutivo hace balance de la contribución española a alguna de esas metas.

En el año 2002 los líderes internacionales se comprometieron en Naciones Unidas a trabajar para, entre otros objetivos, reducir a la mitad en el año 2015 el número de personas sin acceso a agua potable y saneamiento en todo el mundo, con respecto a los niveles de 1990.

Ese objetivo se ha cumplido solo en parte. A pesar de que 2.300 millones de personas han conseguido tener acceso al agua potable desde 1990, otros 2.500 millones de ciudadanos carecen de sanitarios básicos como inodoros o letrinas.

Según Naciones Unidas, la falta de saneamiento apropiado es uno de los principales factores que causan la muerte de un niño cada dos minutos y medio como consecuencia de diarreas que podrían prevenirse.

Pero también es una cuestión de seguridad para las mujeres, pues están más expuestas a la violencia sexual. La ausencia de retretes en las escuelas es uno de los motivos más importantes por el que las niñas abandonan la educación una vez que llegan a la pubertad.

Para contribuir a extender el acceso al agua y el saneamiento específicamente en la región de América Latina y el Caribe, el anterior Gobierno socialista creó en 2007 el Fondo del Agua, dotado con 800 millones de euros que se han invertido en 66 proyectos repartidos en 19 países.

En esta región, el porcentaje de personas con acceso a agua potable ha mejorado del 85% en 1990 al 94% en 2012. Aun así, sigue habiendo 50 millones de personas sin acceso a agua potable y se estima en 125 millones el número de ciudadanos que carecen de sistemas de saneamiento.

Por eso, el Gobierno español asegura que el trabajo en este ámbito del agua y el saneamiento seguirá siendo una prioridad de la cooperación española, según se ha comprometido este miércoles el secretario general de Cooperación, Gonzalo Robles.

En un desayuno informativo, Robles ha avanzado que el lunes próximo el Gobierno ha organizado un acto para poner en valor el trabajo realizado por el Fondo del Agua y que estará presidido por el Rey Felipe VI.

LA IMPORTANCIA DE UN RETRETE PARA LA MUJER

Robles ha destacado el "gran impacto" que este Fondo ha tenido sobre todo en la vida de las mujeres a las que ha llevado agua potable a sus comunidades. "En uno de mis viajes a una zona remota de Panamá las mujeres me contaban que ya no tenían que dedicar el día entero a ir a por agua al río", ha relatado.

El fondo también ha llevado agua y saneamiento a 1.150 escuelas de la región, ha remarcado Robles, que subraya que el número de beneficiarios indirectos de estas actuaciones es muy superior a los tres millones de personas que se han beneficiado de manera directa de los proyectos financiados por el fondo.

Y es que la extensión del acceso al agua potable y saneamiento reduce las tasas de mortalidad infantil, aumenta la escolarización de los niños y sobre todo de las niñas y repercute en la alimentación al facilitar el regadío de cultivos, ha recordado.

Robles reconoce que también empresas españolas han resultado beneficiarias de las licitaciones de las obras de infraestructura. Eso sí, precisa, todas las adjudicaciones se han hecho tras la apertura de concursos públicos que no abre la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, sino el país beneficiario.