El embajador venezolano quiere "voltear la página" en las relaciones con Colombia

El diplomático señaló hoy en entrevista con Caracol Radio que se debe trabajar conjuntamente para buscar soluciones a los problemas que beneficien a los dos países, pero siempre "con respeto al diálogo interno".

Con base en "acuerdos de transparencia voltear la página y llevar una relación diplomática entre los dos países con un diálogo transparente, directo, respetuoso y que la vía diplomática prevalezca para resolver cualquier incidente", indicó.

Rincón fue designado la víspera por el Gobierno venezolano como nuevo embajador en Colombia, en sustitución de Gustavo Márquez, y está a la espera del beneplácito al Ejecutivo colombiano.

"Tan pronto cumpla los trámites administrativos, en especial el beneplácito del Gobierno colombiano y los trámites internos en Venezuela, y una vez juramentado procederé a llegar a la hermana República de Colombia para trabajar" con base en esos acuerdos que "han adelantado ya nuestros dos presidentes", afirmó.

El designado embajador agregó que las relaciones deben servir para el crecimiento de los dos países e indicó que los dos Gobiernos están trabajando para que "nunca más existan conflictos".

"Podrán presentarse problemas, pero la buena voluntad, la buena fe y la transparencia de los dos países en el trabajo conjunto resolverá cualquier cosa en beneficio de estas dos patrias hermanas", subrayó.

Rincón precisó que el factor económico es uno de los principales retos que deberá asumir por la caída del comercio bilateral.

El designado embajador de Venezuela en Colombia fue presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y se desempeñaba desde mayo de 2005 como embajador de Venezuela ante El Vaticano.

Chávez y su homólogo de Colombia, Juan Manuel Santos, zanjaron el pasado 10 de agosto en una reunión celebrada en la ciudad colombiana de Santa Marta, una grave crisis bilateral que se prolongó durante un año y que incluyó la ruptura de las relaciones el pasado 22 de julio.

Caracas y Bogotá ya establecieron una hoja de ruta para consolidar su recién restablecida relación y avanzar en la cooperación en diversos campos, entre ellos el comercio, la seguridad y el desarrollo social en su zona terrestre fronteriza, de 2.219 kilómetros.